Según se pudo determinar los “carniceros nocturnos” ingresaron al campo de Rubén Boixadera y arrearon dos vacunos hasta un corral donde con seguridad cortaron el ligamento amarillo para inmovilizarlos y procediendo de esta manera a faenarlos.
Los vacunos de 400 kilos de peso, podrían dar en el gancho media reses de aproximadamente 85 kilos (novillitos).
Por último, los cacos debieron movilizarse en una camioneta o un vehículo de iguales características para poder llevar lo producido por el ilícito.
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