Basándose en esta información y las recientes experiencias de sus asociados, mediante una denuncia por abuso de posición dominante presentada el 6 de febrero pasado ante la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia, la Asociación Pyme solicitó que se apliquen las sanciones correspondientes a las empresas Acindar, Siderar, Siderca, Loma Negra, CIASA, Holcim, Aluar, C&K Aluminio SA y su absorbida por fusión Refinería Metales Uboldi, se convoque a audiencias públicas para cada sector en cuestión, y se haga parte de los procedimientos a los afectados de los hechos investigados, a las asociaciones de consumidores y asociaciones empresarias reconocidas legalmente. En relación a este inicio de gestiones legales, el secretario de la Asociación Pyme y referente de su Mesa Nacional, Daniel Moreira, explicó que “desde la entidad decidimos organizarnos y realizar diversas acciones contra el abuso de posición dominante de los capitales concentrados, un hecho repudiable que las pequeñas y medianas empresas sufren históricamente, haciéndoles frente en una clara defensa de este proyecto nacional, de este proyecto económico con inclusión social”. Los hechos Durante la década del noventa se consolidó un proceso de concentración y extranjerización de la propiedad de las firmas, principalmente a partir de las privatizaciones y del proceso de venta de activos de los grandes grupos económicos nacionales ante la ventaja de los altos precios en moneda extranjera que brindaba la convertibilidad. Hoy, nuestra economía presenta una estructura productiva altamente concentrada, con la presencia de pocas grandes firmas que controlan los precios y las cantidades producidas de una gran variedad de bienes e insumos básicos para la producción de otros tantos. Asimismo, la tasa de ganancia de estas firmas se ha más que triplicado en varios sectores y en pocos años. Sus aumentos notoriamente sobrepasan el promedio del resto de los insumos, superando también la variación de los salarios e, incluso, sin estar justificados por los precios internacionales o razones de mercado. Así se apropian de una renta extraordinaria en detrimento del resto de la cadena de valor, especialmente de las empresas más vulnerables y de los consumidores, fortaleciendo su posición dominante y consolidando su poder y sus estructuras económicas. Los sectores del acero, aluminio y cemento, comprenden un conjunto muy variado de escalonamientos productivos y se posicionan como complejos claves de la economía argentina -en términos de valor agregado, empleo e inversiones, entre otros-, tratándose de industrias orientadas a la producción de insumos de uso difundido, ya que como resultado de un proceso industrial, forman parte de la cadena de producción de casi la totalidad del resto, con una gran relevancia para las relaciones de insumo-producto de mipymes nacionales. Además, amén de sus ventajas en el mercado y gozar del privilegio de subsidios públicos directos e indirectos multimillonarios, los tres sectores en cuestión cuentan con empresas de gran poder de influencia pública, logrando ser consideradas esenciales para la vida económica nacional, dando ello cierta verosimilitud para que sus demandas, exigencias o intereses sean atendidos prioritariamente. De esta manera, las empresas pueden imponer, por su posición dominante, precios y condiciones a sus clientes y proveedores, hecho que es observado cotidianamente por las mipymes a las que les establecen unilateralmente plazos de entrega y condiciones de calidad. No quedan dudas, luego del análisis efectuado sobre estos tres sectores de actividad, que la excesiva concentración de la propiedad de los activos productivos en pocas manos constituye un límite a las políticas distributivas, que sólo podrá ser revertido en la medida que las regulaciones estatales resulten contundentes y efectivas, transparentando las cadenas de valor y fortaleciendo organismos e instancias de defensa de los proveedores y consumidores. Para defender con todas las armas legales posibles todo lo hasta ahora logrado, para consolidar la actividad productiva nacional y para afianzar el mercado interno, consideramos que es imprescindible ponerle límites a los monopolios para que no logren su propósito desestabilizador, porque este proyecto nacional de inclusión es nuestro, de todos los argentinos y todos tenemos que garantizar su defensa. PROPUESTAS PARA MEJORAR LA COMPETENCIA DE LOS MERCADOS CONCENTRADOS Para poner límites a estos abusos, que van en detrimento de los intereses de todos los sectores, desde la Asociación Pyme proponemos algunas medidas que entendemos pueden tener un alto beneficio para avanzar con éxito en ese propósito. 1) Puesta en marcha del Tribunal de Defensa de la Competencia, ya creado por ley, para darle mayor fortaleza a las investigaciones que se realizan, siendo más efectivas las sanciones y multas impuestas a las grandes firmas. 2) Creación de la Defensoría de las Pymes, para que se puedan acercar las denuncias concretas cuando las pymes se ven perjudicadas por actuaciones abusivas de las grandes firmas. 3) Modificación del Código Comercial, orientada a incorporar las llamadas “facturas conformadas”, para que las facturas que las pymes argentinas entregan a sus proveedores o clientes de gran tamaño podrían poseer ejecutividad en el cobro, tal como lo tiene el cheque en la actualidad. 4) Puesta en marcha del Registro de Subsidios e incentivos a las grandes empresas, ya creado por ley, para que las pymes y toda la comunidad podamos conocer cuánto de los impuestos que pagamos todos los ciudadanos se llevan las grandes empresas de capital concentrado en programas públicos de distinto tipo. Mesa Nacional de la Asociación Pyme ¿Quiénes somos? La Asociación Pyme agrupa a emprendedores, micro, pequeños y medianos empresarios nacionales, defendiendo y representando a este sector que conforma el 99% de las empresas argentinas y genera el 70% de los puestos de empleo. La entidad se extiende a nivel territorial a través de las Casas Pyme, haciendo parte al resto de la Economía Social y Solidaria y articulando con el Estado. A las ya inauguradas en Salta, Lanús, Avellaneda, Ituzaingó, Monteros, CABA y La Rioja, durante el 2013 sumamos la puesta en funcionamiento de las Casas Pyme de San Fernando, Baradero, Vicente López, Rosario, Córdoba, Bragado, Laguna Paiva y Santa Fe. Hoy estamos hablando de 16 Casas Pyme abiertas y con otras 50 por inaugurarse, confluyendo en una gran red que trabaja para la creación, desarrollo y consolidación de empresas nacionales.
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