En este panorama, quienes más ponen en juego estas elecciones de medio término son el recientemente conformado Frente Renovador y todo el universo de legisladores que comprenden el Frente Progresista Cívico y Social, hoy aún separados. En efecto, el massismo, que irrumpió este año a partir de la escisión de legisladores del FpV, el radicalismo y el Pro-Peronismo, deberá renovar 26 de las 36 bancas que posee (9 en Senadores y 17 en Diputados); mientras que el progresismo pone en juego 20 de los 31 escaños que acumulan sus diferentes fuerzas (8 en el Senado y 12 en Diputados).
En tanto, el oficialismo solo pone en juego un tercio del total de bancas en disputa, merced al revés electoral que sufrió en 2009, a la vuelta del conflicto con el campo. De esta forma, el FpV solo arriesgará 16 de las 57 bancas que actualmente ocupa en la Legislatura (4 en Diputados y 12 en el Senado. Estos números hubieran sido mayores, pero este año el kirchnerismo perdió 7 legisladores, que se “mudaron” al massismo.
Además de estos bloques, que juntos prácticamente monopolizan el panorama legislativo –teniendo en cuenta, claro, que el FPCyS, hoy dividido en varias bancadas, podría unificarse tras las elecciones-, diferentes espacios del peronismo opositor se juegan su supervivencia, poniendo en juego 4 de las 5 bancas que poseen. En tanto, en Diputados Nuevo Encuentro arriesga solo una de las 3 bancas con las que cuentan. Igual número deberán revalidar el denarvaísmo –tiene 4- y Lealtad Peronista –son 2 diputados de extracción moyanista.
EL PANORAMA EN DIPUTADOSComo se dijo, la cámara de Diputados disputará 46 de las 92 bancas, que se elegirán en las secciones Segunda (11), Tercera (18), Sexta (11) y Octava (6).
En la cámara Baja, el FpV pondrá en juego 12 de sus 37 escaños: 3 en la segunda, 5 en la tercera, 3 en la sexta y una en la octava. Dentro del arco oficialista también puede contarse la situación de Nuevo Encuentro que, como se dijo, pone en juego una de las tres bancas que posee.En el arco opositor lo que se pone en juego es mayor. El bloque massista deberá revalidar 17 de sus 22 escaños: 5 en la segunda, 7 en la tercera, 3 en la sexta y 2 en la octava.
El Frente Progresista -hoy conformado por la UCR, los Radicales del Pueblo, el FAP y la Coalición Cívica-, arriesgará en Diputados 12 de las 22 bancas que posee. Finalmente, el diezmado bloque denarvaísta renueva 1 de sus 4 diputados (Gonzalo Atanasof) y Lealtad Peronista, la bancada “moyanista” también deberá revalidar uno de sus dos escaños.
EN EL SENADO La cámara de Senadores disputará 23 de las 46, que se elegirán en las secciones Primera (8), Segunda (11), Cuarta (7) y Quinta (5). Allí el FpV solo pone en juego 4 de las 20 bancas: una en la primera, 2 en la cuarta y una en la quinta.
En tanto, el massismo deberá revalidar 9 de sus 14 senadores, correspondientes 5 a la primera sección, 3 en la cuarta y una en la quinta. El Frente Progresista, por su parte, se renueva casi plenamente, debiendo poner en juego 8 de las 9 bancas con las que cuenta en la actualidad –repartidas entre los bloques de la UCR, la Coalición Cívica y el FAP. Y la Unión Pro-Peronista perderá a dos de sus tres legisladores.
CUATRO AÑOS, UNA VIDA
Si se miran los resultados de las elecciones 2009, difícilmente pueda pensarse que se trate de la misma Legislatura: en ese entonces, los grandes ganadores fueron dos fuerzas opositoras, el Acuerdo Cívico y Social (integrado por la Coalición, el GEN y la UCR) y Unión PRO (donde confluyeron macristas, denarvaístas y felipistas), que se impusieron en 5 de las 8 secciones electorales, haciéndose el primero de 15 diputados y 10 senadores, mientras que el peronismo opositor logró 15 y 7 bancas, respectivamente. En tanto, el FpV solo ganó las secciones primera, tercera (Conurbano) y octava, logrando 16 diputaciones y 6 senadurías.
Esos números, sin embargo, se modificaron dramáticamente: el ACyS se dividió en cuatro bloques de Diputados (CC, FAP, UCR y Radicales del Pueblo) y cuatro de Senadores (CC, FAP, UCR y Cambio Radical), mientras que otros legisladores se sumaron a otras bancadas, como el caso de Natalia Gradaschi, quien actualmente compone Nuevo Encuentro tras su salida de la CC.Por su parte, Unión PRO estalló en 5 bloques de Diputados y 2 de senadores, aunque luego muchos volvieron a confluir en la conformación del Frente Renovador.
Pero el Frente para la Victoria no estuvo exento de “cambios”: en cuatro años perdió 6 diputados –dos moyanistas y cuatro massistas. En el Senado, en tanto, la fuga fue mayor: 8 legisladores abandonaron el oficialismo y recalaron en el Frente Renovador.
400 CANDIDATOS
En las elecciones del domingo un total de 396 candidatos de siete fuerzas diferentes –solo cuatro tienen presencia en todas las secciones- compulsarán por las 69 bancas que se ponen en juego hasta el 2017.
De los 9 partidos políticos que se presentaron a las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) 7 lograron sortearla, quedando fuera las alianzas Compromiso Federal y Lealtad y Dignidad. De ese universo, en tanto, el Frente de Izquierda, Unión con Fe y Podemos solo tendrán participación en algunos territorios. (DIB)
|
