Mucha agua paso bajo el puente.Hubo denuncias periodísticas, utilización de las redes sociales, protestas, programas de televisión capitalinos y hasta se hablo el tema en el living de Susana. Todo sirvió, porque a los funcionarios de turno se les ablandó el corazón y en el presente los animales dieron un paso adelante en su estado.
Si se recorre el Zoo, en el presente, hay nueva carteleria, nueva disposiciones de animales en las jaulas, animales con mejor expresión en los ojos, y en el físico, el predio más prolijo, ya no fluye olor a agua podrida en la laguna después de sacar toneladas de barro y desperdicios. Algo cambio y deberá seguir cambiando.Pero la conclusión final es porque se debió hacer tanto "ruido", para que se realicen cosas solucionables. ¿Los dirigentes colonenses a donde estaban?
Los responsables
El presupuesto del Jardín Zoológico "Don Gabriel García" llega a 700 mil pesos anuales. Seguramente el Director actuante debió pedir que se autoricen gastos que nunca se habilitaron para mejorarlo. Solamente recordar que hubo una jaula destrozada por más de un año, y al cual se le había caído una rama de eucalipto encima. La duda para gran parte de la población es que funcionario realizaba los recortes de gastos para que el Zoo local llegará a las condiciones donde finalmente se vivieron situaciones ver- gonzantes que todo el país conoce.
Si antes no se podía gastar, por que meses después se pudo hacer, sin afectar el normal desarrollo presupuestario comunal, ni endeudar al municipio en millones de pesos. Tal vez la última pregunta sea cuantas áreas más comunales siguen en este estado. O la toma de terrenos por casi sesenta familias en la quinta de 50 y 134 no tenga la misma semilla que engendró el estado calamitoso al que llegó el Zoo.El camino fácil es cargar las culpas a jóvenes que lucharon por su ideal, y no recordar a los burocratas de "manos blancas" que tienen el corazón en los bolsillos de pantalones.
¿Peritos de partes?
En junio de 2009 Colón Doce publicó la siguiente nota:Visita del Ministerio de Asuntos Agrarios"Encontramos el zoológico en condiciones"Se realizó en el Jardín Zoológico de nuestra ciudad una visita de representantes del Ministerio de Asuntos Agrarios con la intención de que el paseo público sea registrado en la Dirección de Flora y FaunaFabián Mondino, responsable del Zoo de Colón, nos explica: "Tenemos la suerte de recibir a la Directora de Flora y Fauna del Ministerio de Asuntos Agrarios de la provincia de Buenos Aires, que nos viene a hacer una visita que tiene que ver con una inspección que necesitábamos para avanzar en algunos temas. Por suerte se ha realizado y han encontrado todo muy bien".
Mónica Casiaro es la funcionaria que tuvo la responsabilidad de hacer la inspección para registrar el Jardín Zoológico en Flora y Fauna e indica los motivos de la visita: "Hicimos una recorrida preliminar para hacer el registro definitivo del zoológico en el Ministerio de Asuntos Agrarios. Desde Colón ya se había presentado un proyecto que constaba de tres etapas. La primera ya fue finalizada, se trataba de completar la información que pide la Ley de Zoológicos, por ejemplo, algunas medidas de seguridad, ambientación de jaulas, un proyecto educativo. Todo eso ya está cumplimentado".
En cuanto a como ha encontrado las instalaciones del paseo público, Casiano explica que "se trata de un zoo que se nota que está hecho con trabajo, con el sacrificio de los empleados, como la mayoría de los municipales, que obviamente no es lo mismo que uno privado", al tiempo que agrega: "Me llevo una grata impresión, de hecho si lo vamos a registrar es porque lo encontramos en condiciones para el ingreso a Flora y Fauna".
Los pasos a seguir de este proyecto para tener un Jardín Zoológico que cumpla todas las normas que pide la Ley que rige en este ámbito tienen que ver con entregar documentación de manera anual, informar sobre los nacimientos, las bajas de los animales: "Por supuesto continuaremos con las visitas y las inspecciones. Estamos para dar apoyo y soluciones", finaliza.
El interrogante es en que cambio tanto el Zoo de Colón en tan poco tiempo. Las jaulas estaban iguales, los animales que se encontraban también, no había registro de los animales, ni tampoco una historia clínica particular, ni las dietas "persona- lizadas" con los registros de los medicamentos que se les daba. El mono seguía al lado de su peor enemigo el tigre y así sucesivamente. Lo cierto es que algo falla y cada uno debe comprometerse a trabajar en serio.
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