principio de esta semana, el Ministro del Interior y Transporte de la Nación, Florencio Randazzo, anunció que presentará un proyecto de ley que establece la prohibición total de consumir alcohol para los conductores de vehículos.
Según sus propias palabras, propondrá al Congreso que se modifique el artículo 48, inciso A, de la ley 24.449, que prevé un límite en la ingesta de alcohol de 0,5 miligramos por litro de sangre para poder conducir.
Es que el alcohol se transformó en uno de los protagonistas principales en el mapa accidentoló- gico nacional. De acuerdo a las estadísticas de la asociación "Luchemos por la Vida", el alcohol está presente dentro del 40% de los accidentes mortales de tránsito y en un 25% en los accidentes viales en general.
Efectos del alcohol
En un chico de 15 o 16 años cuando tiene 0,80 gramos de alcohol en sangre, las posibilidades de tener un accidente son 150 veces más que en condiciones normales. Y si tiene entre 19 y 21 años, son 70 veces más. Cuanto más chicos son, más riesgo hay.
A esto hay que agregarle otros valores, porque hoy se sabe que si van tres personas que han consumido alcohol en un auto hay una determinada posibilidad de choque, si van cuatro aumenta, si van cinco sube aún más y si van seis es mucho mayor. Cuantas más personas van en un auto, mayor es el riesgo. Esto es así "porque se va potenciando esa agresividad al manejo.
Hay quien argumenta que toma café, se baña, duerme un rato, pero nada de eso sirve para acelerar la eliminación del alcohol o sus efectos. Es decir que el hígado tiene una velocidad que no se modifica con ninguna de estas acciones.
En tanto existe un gran desconocimiento de lo que provoca el alcohol. Hay algunas cosas que son hasta curiosas, cuando uno supera los 0,60 o 0,70 se empieza a tener dificultades en reconocer el color rojo, se disminuye el campo visual y uno empieza a tener una imagen en túnel. Y además está el enlentecimiento de los movimientos y la pérdida de reflejos, y se sobreestima las posibilidades, entonces uno se cree que es Fangio, se pierde el miedo, se maneja más ligero, y todos son efectos del alcohol.
En Colón
La ausencia de una política preventiva con respecto al consumo de alcohol en jóvenes llama poderosamente la atención. Es una tema que parece no existe en la agenda comunal. Por otro lado, la Municipalidad tiene en existencia alcoho- límetros, (que es política preventiva) pero si se usan deben ser un secreto de Estado imposible de revelar.
En las últimas semanas se estuvo atento que pasaba los sábados y domingos. Es muy fácil de determinar por cualquier ciudadano, a partir de las 4.30 de la madrugada existen zonas cerca de lugares de expansión nocturna con la ausencia total del Estado. El ingreso de menores a los lugares de divertimiento juvenil, tampoco es controlado "Siempre está la "cantinela" que mejor está controlado adentro de un boliche que suelto por la calle". (Datos Democracia)
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