A través de un comunicado, la entidad -que nuclea a casi 100 mil kiosqueros de todo el país- objetó la resolución normativa 2/2013 de la Agencia de Recaudación de Buenos Aires (ARBA), la cual está vigente desde principios de marzo.
Para la Unión de Kiosqueros, la medida "establece nuevas alícuotas arbitrarias para las operaciones de venta minorista de cigarrillos y pone en cabeza de los distribuidores la obligación de actuar como agentes de percepción del impuesto de Ingresos Brutos". "Esta nueva alícuota anula el margen de ganancia de los kiosqueros", se indicó.
El presidente de la UKRA, Eduardo Medaglia, explicó que la resolución "impacta de lleno en las ventas legales de distribuidores y kiosqueros" y reconoció que "el monto del impuesto toma como base el valor total del producto, cuando la percepción debería ser sólo sobre la rentabilidad".
"El resultado es una pérdida de ganancia en la venta del paquete de cigarrillos para el kiosquero: esto fomenta el contrabando interprovincial ya que los kiosqueros buscarán mejores precios en otras jurisdicciones", indicó Medaglia, quien reconoció que la medida pesa sobre la actividad de 47.700 kiosqueros de la provincia de Buenos Aires. (DIB)
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