Frente a esta situación, el Ministerio de Salud bonaerense recomendó que se recuerden las medidas sociales de prevención, se respete el esquema de vacunación y no se opte por la automedicación.“El descenso y los cambios de temperatura, los fuertes vientos que ayudan en la caída de las hojas, el polen y el polvo en el aire, todos estos cambios hacen que seamos más sensibles a las enfermedades respiratorias y las alergias, sobre todo los niños, ancianos y las personas que tienen problemas respiratorios”, explicó el ministro de Salud, Alejandro Collia en un comunicado difundido hoy.
El ministro destacó que “todos los años entre fines de marzo y principios de abril comenzamos a ver el incremento de atenciones en las guardias por enfermedades respiratorias, que llegan al 20 por ciento”. Y destacó: “por eso estamos recordando a la población las medidas de prevención que deben tomarse para que el cambio de clima no sea sinónimo de enfermedad”.
La bronquiolitis, neumonía y las enfermedades tipo influenza (ETI) se intensifican durante abril, con el arribo del clima otoñal, y afectan sobre todo a las personas que padecen asma y otras enfermedades pulmonares y bronquiales. En el caso de los niños, especialmente en los menores de 2 años, debe prestarse atención a las IRAB: las más habituales son la bronquitis, bronquiolitis y neumonía.
El año pasado, según el comunicado de Salud, en la provincia de Buenos Aires, se registraron 150 mil casos menos de contingencias respiratorias que en 2011, gracias en gran parte a la Campaña Invierno 2012, mediante la que se vacunaron contra la gripe 1.500.000 personas, entre niños y adultos. La vacuna antigripal se encuentra disponible en 1.640 centros vacunatorios de la Provincia.
“La vacuna antigripal es muy importante y este año previene contra la gripe B H1N1 y H3N2 que es la cepa que se encuentra circulando en el hemisferio norte”, informó el director provincial de Atención Primaria de la Salud, Luis Crovetto.
El frío y los virus respiratorios van de la mano: los microorganismos que generan las enfermedades respiratorias pueden sobrevivir hasta 48 horas cuando las temperaturas son inferiores a los 20 grados. Eso, sumado al encierro cuando comienza el frío, genera que muchas personas se enfermen.
Las medidas preventivas más importantes a tener en cuenta son: protegerse con la vacunación antigripal; mantener el lavado de manos frecuente, sobre todo al llegar al hogar; evitar concurrir a espacios públicos cerrados con gran concurrencia; mantener ventilados los ambientes y realizar limpieza de la casa con lavandina; no fumar en ambientes cerrados y mucho menos si hay niños; y mantener la lactancia materna como potente generadora de defensas en el caso de los bebés.Medidas de prevención en otoño -Mantener las vacunas del calendario obligatorio al día.-La población de riesgo debe vacunarse contra la gripe.-Lavarse las manos frecuentemente con abundante agua y jabón: al regresar al hogar y antes de preparar alimentos, comer o entrar en contacto con bebés y niños pequeños.-Ventilar los ambientes y desinfectar las superficies con agua y lavandina.-Evitar fumar en ambientes cerrados. (DIB)
|