En tanto, los gremios votaron otra medida de 48 horas para la semana del 4 de marzo, aunque los detalles de la misma serán resueltos el viernes que viene en caso de que el Gobierno no convoque a reuniones paritarias.
La medida fue oficializada esta noche por los principales sindicatos docentes de la provincia, aunque la mayoría de los gremios ya había adelantado ayer que el inicio de clases en la fecha oficial no iba a ser posible, luego de irse con las manos vacías de la reunión que mantuvieron con funcionarios provinciales.
De esta forma, se sumarán a los cegetistas de Udocba, que habían votado un paro de 72 horas, y a los auxiliares de la educación nucleados en Soeme, que pararán solo el lunes.Por la mañana, el puntapié inicial lo había dado la FEB al votar un paro de 96 horas cuya modalidad sería resuelta con el resto de los gremios.
La misma decisión había sido adoptada más tarde por UDA y Amet.Más tarde, tras el congreso de Suteba –que también mandató a sus dirigentes para resolver paros por 96 horas- el FGD definió la modalidad de la medida: parar por 48 horas en el inicio del ciclo lectivo, y esperar alguna señal de la Provincia antes de activar otra medida similar para la semana siguiente. En tanto, el miércoles se desarrollará una “jornada de esclarecimiento” para padres y alumnos en las que se explicarán las razones de la protesta.
Finalmente, el jueves los gremios confluirán en una marcha a la Casa de la Provincia de Buenos Aires en Capital Federal, y el viernes los dirigentes anunciarán los nuevos paros, en caso de no ser convocados por la Provincia.
“La Provincia tendrá que encontrar la forma de resolver esto. Dejaron las cosas para último momento, sin hablar con nosotros o haciéndolo por los medios”, señaló a DIB el titular de Suteba, Roberto Baradel, quien pidió al Gobierno “que sinceren la situación en la que se encuentra la provincia”, al tiempo que se quejó porque el Gobierno “paga bonos de deuda por 11 mil millones de pesos y no los sueldos de sus empleados”.
En tanto, a nivel nacional mañana la central Ctera resolverá las medidas a tomar, aunque todo indica que también avanzará en un paro de 48 horas para el lunes y martes próximos.
Un paro anunciado El miércoles, el Gobierno bonaerense anunció la convocatoria a los gremios para una reunión “informal” en la que les pediría “paciencia” hasta el 15 de marzo para definir la nueva pauta salarial, mientras ganaba tiempo para negociar con el Gobierno nacional el envío de fondos extra para afrontar las subas previstas.
En el encuentro, realizado anoche en La Plata, los funcionarios bonaerenses encabezados por la titular de la cartera educativa, Nora De Lucía, y el ministro de Trabajo, Oscar Cuartango, pidieron a los docentes “tiempo” para definir una oferta salarial, pero no se llevaron una respuesta favorable: los gremios calificaron de “poco serio” el pedido y adelantaron que el paro era inevitable.
Según reconocieron varios funcionarios sciolistas, la provincia necesita al menos 12 mil millones de pesos para cubrir el aumento del 22 por ciento establecido de manera unilateral por el Gobierno nacional. De ese número, la Provincia apenas cubriría una cuarta parte, y el resto esperaba financiarlo con ayuda directa de Nación y un endeudamiento en dólares.
Sin embargo, hasta ahora los canales de diálogo con la administración federal parecen estar cortados: pese a que había trascendido que funcionarios sciolistas habían acordado una reunión con el ministro de Economía nacional, Hernán Lorenzino, desde Gobernación se encargaron de desmentir la especie. Fuentes consultadas por DIB señalaron hoy que “no hubo ningún tipo de contacto” con funcionarios nacionales y que, por ende, el permiso de endeudamiento en dólares lanzado por la administración sciolista sigue aún trabado.
Médicos y estatales también
Por su parte, los médicos nucleados en Cicop resolvieron la realización de un paro de actividades en todos los hospitales de la provincia en rechazo por la falta de propuesta salarial por parte del gobierno bonaerense, mientras que definirán nuevas medidas de fuerza a partir del 11 de marzo si el Ejecutivo no destraba el conflicto.
En tanto, el gremio iniciará el 4 de marzo un plebiscito entre sus afiliados para definir los pasos a seguir. Con esa opinión, el congreso de delegados volverá a reunirse el 9 de marzo para resolver “medidas de fuerza progresivas” con el fin de lograr el aumento salarial, mejorar las condiciones de trabajo, la calidad de atención y reclamar el fin del ajuste implementado por parte del Gobierno nacional y provincial”, según se indicó en un comunicado.
De esta forma, los médicos confluirán con los estatales de ATE y con la CTA bonaerense, que marcharán a la Casa de la Provincia en Capital el lunes. A la movida también se sumará Udocba. (DIB)
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