Rara paradoja. Mientras que la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner señala que el modelo económico puesto en práctica debe tender a una mayor justicia social, en nuestra ciudad ocurre lo contrario.
Según ya están denunciando los sindicatos municipales y partidos políticos con representación en el Concejo Deliberante el Departamento Ejecutivo Municipal otorgó un premio de 120 mil meses entre los funcionarios de primera línea, repartidos según la categoría y responsabilidades en 11 mil, 10 mil y 6 mil pesos. La pregunta es ¿Quién autorizó la maniobra? ¿Qué partida del Presupuesto se utilizó?
Por otro lado, y como contrapartida la “cabeza económica del municipio” dijo que había que ser austeros y sacó a los empleados municipales los 130 pesos no remunerativos adosados al sueldo. No solamente pasó esta aberración, muchos –por no decir la mayoría- no recibieron el pan dulce y la sidra para evitar gastos innecesarios en la comuna colonense.
Dicen los que saben que los “parlanchines” siempre repiten la historia, esta vez repitieron la más siniestra: la del menemismo.
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