El funcionario cuestionó a las empresas generadoras de electricidad señalando que “si esperan un esquema de tarifas dolarizadas basadas en la exportación de energía es porque no entendieron el proceso transformador iniciado en 2003”, y agregó que “ya no disimulan sus intenciones de volver atrás”.
De Vido salió al cruce una carta que la Asociación de Generadoras de Energía Eléctrica de la República Argentina (AGEERA), envió a la Compañía Administradora del Mercado Eléctrico Mayorista alertando sobre supuestos riesgos en el servicio por el retraso en los pagos de CAMMESA por la energía que le suministran las usinas.
De Vido refirió que “los resultados contables de esas empresas arrojan valores positivos, por lo que nada justifica esa advertencia, que es una amenaza inaceptable de quienes pretender volver a la época donde la industria no podía producir por falta de competitividad en sus insumos energéticos y los hogares debían afrontar las tarifas más caras de la región”.
En la carta referida, publicada por el diario La Nación, Ageera sostiene que la falta de pago por parte de CAMMESA en tiempo y forma "agota el capital de trabajo y pone en riesgo la operación de unidades generadoras y, en consecuencia, el suministro de energía eléctrica.
La situación planteada entre CAMMESA y los generadores deriva, al menos parcialmente, de la merma que a su vez la Compañía Administradora viene registrando en sus ingresos por el pago parcial de sus facturas por parte de las distribuidoras de electricidad, varias de las cuales pertenecen a grupos que simultaneamente operan en generación.
La clave que explica esta situación resulta ser la política tarifaria para el sector, que no ha variado hace años, y sobre la cual el gobierno les comunicó que definirá un esquema basado en el cálculo de costos más una "rentabilidad adecuada" para las diversas empresas del sector.
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