Los ladrones ingresaron levantando varias chapas del techo y una vez en el interior anularon las alarmas. Los delincuentes se apoderaron de un valioso botín integrado por plasmas y computadoras portátiles. Los vecinos no habrían oído ni observados movimientos extraños.
Por otro lado, los delincuentes debieron llevarse los artículos robados en un vehículo y por ahora no habría testigos a pesar de que la calle 49 es muy transitada sobre todo en jornadas festivas, porque en las inmediaciones funciona un lugar de expansión nocturna.
|