Tenía 33 años. Desde los 26 compartió su vida con el General Perón y guiados por un profundo amor, emprendieron la tarea de transformar la Patria. Apenas siete años de vida pública alcanzarían para transformarlo todo. Nada fue igual después de Evita y nada fue igual sin ella. Había señalado un camino: "La revolución es, ante todo, el triunfo de las nuevas normas de justicia social y del derecho victorioso del más débil, del más olvidado." Para Cristina, las reivindicaciones sociales por las que luchó Eva: "adquieren relevancia en medio de la crisis que ocurre en el mundo" y por eso, están en el centro del Proyecto Nacional.
Cada generación despide a los luchadores leales y valientes que se van antes de tiempo. Su temprana despedida fue un Pueblo en luto. "Aunque deje en el camino jirones de mi vida, yo sé que ustedes recogerán mi nombre y lo llevarán como bandera a la victoria", expresó en su entrega total a la causa del Pueblo.
"Lo que la convirtió en un personaje inmortal fue haber sido una humilde mujer de pueblo que tomó la decisión de cambiar las cosas en favor de la gente a costa de su propia vida", dirá en pleno siglo XXI, su más fiel heredera, Cristina.
Porque Evita había tenido un único anhelo: "Vivir eternamente con Perón y con mi pueblo. Esta es mi voluntad absoluta y permanente, y es, por tanto, mi última voluntad." Su vigencia llevó a nuestra Presidenta a declararla como "Mujer del Bicentenario" en el año 2010.
¿Podía aspirar a más? Sí. A vivir en una Patria Grande con un pueblo feliz. Por eso su ejemplo de coraje, convicciones y lealtad hizo realidad su anhelo y hoy se eterniza en otra mujer que lleva sus banderas a la victoria: "Porque ella, la más odiada, pero la más amada; la más agraviada, insultada y descalificada, pero la más venerada; la más vejada, pero hoy eternamente victoriosa, mirando a la historia definitivamente, con el amor de su pueblo y el reconocimiento, me atrevería a decir, sin temor a equivocarme, de todos los argentinos. (.)
Hoy queremos rendirle homenaje en nombre de todas las mujeres, porque ella nos abrió las puertas a todas. En nombre de los jóvenes que levantan su nombre como bandera y lo llevan a la victoria, en nombre de los millones de trabajadores que han recuperado sus puestos de trabajo, en nombre de los productores, de los empresarios, de los intelectuales, de los científicos, de los estudiantes, de todos los argentinos que confían que una patria mejor merece y puede ser construida por el aporte de todos los argentinos.
Que sea símbolo de unidad, que sea el símbolo de superar viejas antinomias y que desde la historia nos enseñe que es necesaria la unidad nacional, la unidad de todos los argentinos para lograr los grandes objetivos." (Palabras de Cristina en la inauguración del monumento a Evita).
Al cumplirse 60 años de su desaparición física, Cristina volvió a
homenajearla: "Después de 200 años es la primera vez que una mujer aparece en un billete, y si hay que hacerle honor al género, quién mejor que la figura de Eva (.) es un homenaje de todos." La reivindicación de una mujer que supo luchar incansablemente por la Soberanía Política, la Independencia Económica y la Justicia Social es una nueva conquista del Pueblo Argentino que, desde el año 2003, camina hacia la definitiva Independencia en la senda abierta por Perón, Evita y Néstor.
Unidos, Organizados y Solidarios por los sueños de Ella, los logros de Cristina.
JP BA en la Cámpora.
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