Videla y Bignone, condenados a 50 y 15 años de cárcel

La justicia encontró al ex dictador Jorge Rafael Videla penalmente responsable por la sustracción, retención y ocultamiento de menores y la supresión de su identidad. Además, el Tribunal Oral Federal (TOF) 6 definió el robo de niños como plan sistemático....

(GEI) – A más de tres décadas de cometidos los delitos, y al cabo de dieciséis años de la denuncia original realizada por las Abuelas de Plaza de Mayo, la justicia encontró a Videla penalmente responsable por la sustracción, retención y ocultamiento de menores y la supresión de su identidad, en 20 oportunidades, la cantidad de casos ventilados en el juicio durante los últimos 15 meses.
En tanto, el represor Antonio Vañek recibió la pena de 40 años, mientras que Jorge "El Tigre" Acosta a 30 años y Santiago Omar Riveros a 20. El resto de los represores juzgados también recibieron diversas condenas en el marco de este proceso.
Además, el Tribunal Oral Federal (TOF) 6 que integran los jueces María del Carmen Roqueta, Julio Luis Penala y Domingo Altieri definió el robo de niños como plan sistemático, producto de una práctica organizada desde la cúpula del poder militar, y fijó para el 17 de septiembre próximo la audiencia de lectura de los fundamentos de la sentencia.
De los 35 casos de apropiación que se expusieron en los tribunales de Comodoro Py, 26 recuperaron la identidad. De ellos, 20 declararon durante el juicio.
Las abuelas y familias siguen buscando a los que faltan; sus nombres quedaron escritos a modo de marca en una gacetilla que distribuyó Abuelas de Plaza de Mayo por la sentencia: son Guido Carlotto, Ana Libertad Baratti De la Cuadra, Clara Anahí Mariani Teruggi; el/la hijo/a de Gabriela Carriquiriborde y Jorge Repetur; Martín Ogando Montesano; Victoria Petrakos Castellini; la hija de María Moyano y Carlos Poblete y la hija de Ana Rubén y Hugo Castro que “continúan viviendo con una identidad falsa”.

Una sentencia histórica

La sentencia marcó un hito para las causas que investigan el terrorismo de Estado, no sólo por la gravedad de los hechos por los que se juzgaron a los ideólogos de la apropiación de niños sino también por la extensión de la investigación, que se prolongó por más de 15 años.
La causa conocida como Plan sistemático arrancó el 30 de diciembre de 1996 con una presentación de Estela de Carlotto y María Isabel “Chicha” Mariani que aprovecharon el vacío jurídico que dejaron las leyes de Obediencia Debida y Punto Final para denunciar la apropiación de los hijos de las mujeres desaparecidas.
La causa llegó a juicio oral recién a fines de febrero del año pasado y durante 16 meses, con más de 200 testigos, se logró reconstruir el Plan Sistemático que se aplicó durante la última dictadura cívico militar.
“Este proceso se erige en un emblemático testimonio de la tarea de estas mujeres (las Abuelas de Plaza de Mayo), que constituyen un ejemplo universal de la lucha por los Derechos Humanos”, leyeron los abogados de la asociación al momento de su alegato, durante el cual destacaron el juicio como “una gran oportunidad” para que el Poder Judicial revierta el contenido del fallo del Juicio a las Juntas Militares de 1985, en el que Videla fue sobreseído por los 6 casos de apropiación de niños por los que fue acusado por considerar que se trataron de casos aislados.