Las piezas fueron halladas durante un operativo de rutina por la Aduana. Al observar lo que aparentaban ser “extrañas piedras”, los agentes sospecharon que no se trataban de piezas convencionales y dieron intervención a expertos oficiales, quienes aseguraron que se trata de organismos fósiles que datan de millones de años con un importantísimo valor histórico y cultural.
Al confirmarse que eran piezas paleontológicas se presentó una denuncia en la Secretaría Penal “A” del Juzgado Federal N° 1 de Mendoza, a cargo Walter Bento.
Cabe señalar que la Ley 25.743 prevé la pena de 2 meses a 2 años y con inhabilitación especial de hasta 5 años al que transportare productos o subproductos arqueológicos y paleontológicos nacionales e internacionales.
Asimismo, la tentativa de importación o exportación del territorio nacional de estas piezas es pasible de las penas previstas para el delito de contrabando que establece el Art. 863 y siguientes del Código Aduanero Argentino, las que van de 2 a 10 años de prisión.
Una vez resuelta la situación penal, las piezas pueden ser devueltas a su lugar de origen en caso que éste se confirme o en su defecto podrían entregarse al organismo responsable para exposición en un museo del estado argentino.
La AFIP mantiene un fuerte compromiso con la protección del patrimonio cultural y es por eso que desde 2007 ha ejecutado un plan de capacitación y especialización del personal aduanero para combatir el tráfico ilícito de bienes culturales.
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