(GEI) –El 31 de mayo de cada año la Organización Mundial de la Salud (OMS) celebra el Día Mundial sin Tabaco, cuyo objetivo consiste en señalar los riesgos que supone el consumo de tabaco para la salud y fomentar políticas eficaces de reducción de dicho consumo. La celebración de este día es una oportunidad para destacar mensajes concretos relacionados con el control del tabaco ya que se trata de la segunda causa mundial de muerte, tras la hipertensión, y es responsable de la defunción de uno de cada diez adultos. Cabe recordad que el consumo de tabaco es la principal epidemia prevenible a la que se enfrenta la comunidad sanitaria, y por ello son necesarias las más diversas acciones para erradicarlo. “El tabaco mata hasta la mitad de sus consumidores”, recordó la OMS. Además, “se calcula que la exposición al humo del ambiente mata a otras 600.000 personas cada año” y “casi una tercera parte de las defunciones atribuibles al tabaquismo secundario corresponden a niños”. La OMS subrayó que “la mayoría de los adultos que fuman comenzaron a hacerlo antes de los 20 años. Para atraer nuevos fumadores, la maquinaria propagandística de la industria fija incesantemente la mira en los jóvenes, especialmente las mujeres jóvenes”. En tierra bonaerense Con cerca de 5 millones de fumadores -un 33 por ciento de la población- la provincia de Buenos Aires se enfrenta con el imperante desafío de reducir el tabaquismo. “Las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte y discapacidad aquí y en el mundo. A su vez, está probado que dejar de fumar es lo más eficaz para reducir el riesgo de padecerlas”, explicó el ministro de Salud provincial, Alejandro Collia con motivo de el Día Mundial sin Tabaco. El funcionario, médico egresado de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) y director del hospital provincial Ramón Carrillo de Tres de Febrero entre 1996 y 2007, sostuvo que "el 50 por ciento de los fumadores" fallece "por alguna razón vinculada a esta adicción, una enfermedad crónica que requiere tratamiento". Por ello, el representante de la cartera sanitaria instó a los fumadores a tomar conciencia de que el tabaquismo es una "enfermedad crónica que requiere tratamiento" porque "hoy, se sabe, representa la principal causa de muerte evitable". "Se conoce que el 50 por ciento de los fumadores morirá por alguna razón vinculada a esta adicción, una enfermedad crónica que requiere tratamiento, y que los fumadores viven, en promedio, diez años menos que los no fumadores", enfatizó al referirse a coincidentes estadísticas internacionales. Mayores riesgos Profesionales del hospital provincial San Martín de La Plata efectuaron un estudio sobre tabaquismo y riesgo cardiovascular a 1.500 personas del partido bonaerense de San Andrés de Giles, de las cuales el 32,8 por ciento de los varones y el 25,4 de las mujeres eran fumadores. El examen determinó que "el 49,3 por ciento de los fumadores presentaba algún factor de riesgo cardiovascular como hipertensión o diabetes sumado al que, de por sí, acarrea el tabaquismo", precisó el ministerio en un comunicado. Esas personas sufrían "hipertensión, obesidad o colesterol alto y, sin embargo, seguían fumando", resaltó la cartera al difundir el estudio. Expertos del ministerio bonaerense, en el parte informativo, advirtieron que, "en estos casos, aumentan notablemente las chances de sufrir infartos o accidentes cerebrovasculares". El estudio, además, confirmó que el tabaquismo estaba fuertemente asociado a la falta de actividad física regular y al consumo de alcohol y que “una alta proporción de sujetos con alto riesgo cardiovascular continuaba fumando”. Por su parte, la neumonóloga María del Rosario Landea, una de las responsables del estudio, dijo: "Tenemos que lograr, por un lado, que los médicos se comprometan con esta causa: cuando un paciente consulta por un resfrío, por ejemplo, debemos preguntarle si es o no fumador; y, de serlo, ofrecer alternativas terapéuticas para que supere la adicción".
|