El Senado dio media sanción a la suba del inmobiliario rural

El Senado bonaerense dio media sanción a una reforma impositiva que permitirá incrementar la recaudación del impuesto inmobiliario rural en 300 millones de pesos anuales. El proyecto corrige inequidades en el valor fiscal de la hectárea en la provincia de Buenos Aires, que en algunos casos alcanzaba a 250 dólares, pero que hoy se venden hasta ochenta veces esa valuación....

(GEI) –El Senado de la provincia de Buenos Aires dio, el jueves 10 de mayo, media sanción a una reforma impositiva que despertó la oposición de los agropecuarios, que intentaron evitar el avance de la iniciativa forzando el ingreso a la Legislatura. La reforma plantea la actualización en la valuación de las tierras.
Las modificaciones permitirán incrementar la recaudación del impuesto inmobiliario rural en 300 millones de pesos anuales, un aumento del 30% anual. El proyecto corrige inequidades en el valor fiscal de la hectárea en la provincia de Buenos Aires que creaba situaciones inverosímiles, donde el impuesto que debía pagar, por ejemplo, un terrateniente era levemente superior al que ingresaba por patentes el dueño de un auto modelo 2010.
El valor fiscal de la tierra en la provincia de Buenos Aires se encuentra congelado en niveles muy bajos desde los años noventa. El debate para actualizarlos comenzó hace cinco años pero no prosperó. La disminución de los recursos de coparticipación que reciben los municipios bonaerenses este año, partidas por alrededor de 900 millones de pesos que pasaron a estar afectadas al financiamiento educativo, activaron el reclamo de los intendentes hacia el gobernador Daniel Scioli.
Impuesto y recaudación
Ante la imposibilidad de volver a recurrir al endeudamiento externo, por las elevadas tasas de interés, y la incertidumbre económica global, la provincia dispuso modificar distintos impuestos, ampliar las posibilidades para emitir deuda en moneda local y aprovechó el escenario para comenzar a corregir las inequidades en el impuesto inmobiliario rural.
Los cambios propuestos en la materia no sólo amplían la recaudación de la provincia de 1000 a 1300 millones de pesos anuales, sino que llevarán a muchos terratenientes rentistas a pagar bienes personales a nivel nacional.
El congelamiento en la valuación fiscal de la tierra generó un fuerte atraso y profundas situaciones de injusticia fiscal. En distritos donde el precio de la hectárea supera los 10 mil dólares, el valor que se toma en cuenta para pagar el impuesto inmobiliario no supera los 250 dólares.
Con los aumentos el valor fiscal de las propiedades rurales pasará a representar alrededor del 50% del precio de mercado. Junto con las subas, que también estarán acompañadas por mejoras en los registros catastrales, se aplicará una baja en las alícuotas que amortiguará el incremento en el impuesto. En promedio, los aumentos serán del 40%, pero en algunos será significativamente mayor –Carbap estimó que podría superar 700%– porque se trata de terratenientes que pagaban sumas irrisorias.