“La cifra es alta, hay muchas denuncias en este sentido”, aseguró el funcionario y agregó: “Hemos tratado de darle prioridad a este tema en algún sentido, creemos que se puede combatir este tipo de delitos contra la propiedad”.
Otras fuentes consultadas aseguraron que la principal hipótesis de los investigadores es la venganza. Represalias a los controles de motos los domingo a la madrugada, cuando las picadas están en su punto de máximo esplendor. “Cuando los hacen, y secuestran 15 o 20 motos, en la semana se dan estos hechos. Cuando no se hacen los controles, no pasa nada”, aseguró.
Aunque el hecho registrado en la última semana en el barrio “El Picaflor” muestra una realidad distinta a esa, o por lo menos paralela. Según los dichos de Guillermo Bardoni, que sufrió los estragos de los “rompe autos”, los autores se movilizaban en un auto 0 Km., lejos de las motocicletas buscadas por la policía.
Según Bardoni los “rompe autos” iban a bordo de un Peugeot 307 nuevo, y ataviados con un bate de béisbol iban generando diversos daños en los autos estacionados. El hombre los persiguió varias cuadras por la avenida San Martín, aunque no pudo alcanzarlos, pero si pudo anotar la patente. Por el momento no se pudieron hacer detenciones por estos hechos, pero se continúa la investigación para poder terminar con la banda de los “rompe autos”.(DIB).
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