Durante un control de rutina -realizado en el Puente Internacional que une Gualeguaychú con Fray Bentos, Uruguay- “Tiza” realizó su “marcación pasiva” alertando a los agentes aduaneros de que en uno de los automóviles había una importante suma de dinero en efectivo. Al ser consultado, el conductor negó llevar dinero en su vehículo.
Pese a la negativa del viajero, “Tiza” fue señalando a los inspectores cada uno de los lugares en donde estaban escondidas las divisas: en la guantera, en el receptáculo del apoyabrazos y dentro de los asientos delanteros.
Cabe recordar que de acuerdo a la normativa vigente (Resolución General Nº 2705/2009 AFIP), cada viajero puede cruzar las fronteras hasta con 10.000 dólares o su equivalente en cualquier tipo de moneda, ya sea en efectivo o en otro medio de pago (incluidos cheques de viajero).
Los montos superiores deben gestionarse a través de transacciones bancarias y de ser encontrados –como en este caso– el personal aduanero debe proceder a su secuestro y dar intervención a la Justicia con el correspondiente inicio de actuación sumarial prevista y penada por el Código Aduanero (Ley Nº22.415 Art. 979).
|