Digamos primero que los Países en conflicto, encaran este año de Malvinas por distintos caminos, Argentina se inclina por la diplomacia, reclamando al Comité de Descolonización de las Naciones Unidas desde el año 1965, las Islas Malvinas forman parte de los dieciséis territorios autónomos que son analizados con el fin de eliminar el colonialismo.
A nuestro favor los Gobiernos del Mercosur salieron a ratificar el apoyo a la Argentina en el conflicto, con su postura de rechazar el ingreso a sus puertos de barcos con bandera del Archipiélago, una decisión histórica de Brasil, Uruguay y Chile, este último quien tuvo una intervención muy importante en el 82 (sometido por la dictadura de Pinochet), ya que prestó servicios a favor de Gran Bretaña y fue decisivo en acciones como el hundimiento de General Belgrano el 2 de mayo de 1982 que dejó un saldo de 323 muertos y en la operación Mikado, un ataque comando con helicópteros, uno de los cuales cae en Punta Arenas (Chile), con el fin de aniquilar las bases de Rio Grande desde donde partían los aviones, con los cuales se atacó a la flota inglesa (Hundimiento del HSM Sheffield el 4 de Mayo de 1982 por un misil exocet).
Por otra parte la decisión de Gran Bretaña con el fin de conmemorar las acciones de 1982 , es enviar a las Malvinas al destructor HMS Dauntless(intrépido), una nueva generación de buques de guerra , provisto de radares con un alcance de 400kms y misiles que pueden destruir aviones antes de que despeguen . Acompañando estos acontecimientos se encuentra la visita del Príncipe William a las islas para recibir instrucción militar.
Esto deja ver el antagonismo de ambos países, mientras nuestra Presidenta apela a darle una oportunidad a la paz (Lennon) y busca el apoyo diplomático, Gran Bretaña hace alardes de su poderío militar en un ambiente de conflictos económicos y sociales con la unión de los países europeos.
En el medio de esto quedan los Veteranos de Malvinas y aquellos que dieron su vida por defender nuestro territorio, por ello hablo del respeto, respeto a una generación que con tan solo 18 años mostró su valentía y heroísmo ante tanta confusión de los mandos militares. Nuestra Presidenta ordenó al Ministerio de Defensa la creación de una comisión que se encargará de hacer público el Informe Rattenbach, un pedido reiterado que venimos haciendo aquellos ex soldados que defendimos el Litoral Marítimo y que hoy no estamos reconocidos como ex combatientes, el informe nunca fue publicado oficialmente, fue encargado por el Gobierno del dictador Reynaldo Bignone y tomó el nombre de uno de los integrantes de la comisión: el Tte General Benjamín Rattenbach. El informe calificó como aventura militar a la guerra y recomendó penas graves para sus responsables, incluso la máxima para algunos de ellos, aunque luego no fue tenido en cuenta en el juicio militar.
Las heridas de aquel conflicto que finalizó el 14 de junio de 1982 aun no cierran, la rendición según las palabras del comandante de la Task Force fue "local", no se rindió ni nuestra flota de mar, ni nuestros pilotos, ni nuestras bases continentales, es por ello el notable recelo de los colonialistas por custodiar el archipiélago.
Menos aun no se rindió la actitud de un pueblo argentino por el permanente reclamo de la Soberanía sobre nuestras Islas Malvinas.
Walter M. Floridi
|
