Néstor Kirchner nos dejó su proyecto, su obra, su compromiso con el pueblo y con la militancia; nos dejó su voluntad y valentía, nos dejó sus convicciones, el ejemplo de su entrega total a una causa y en especial el haber recreado en los jóvenes la vocación política y el interés por participar.
Néstor fue un "adelantado" a su tiempo. Hoy somos cada vez más los que vemos claramente que este es el camino de la Argentina que nos lleva a las grandes conquistas sociales, económicas y productivas.
Siento una gran gratitud personal hacia Néstor. Cuando me convocó en el 2002 y luego confió en mi persona al elegirme como compañero de fórmula presidencial en las elecciones del 2003.
Lo acompañé como marca la Constitución y mí sentido del deber y de la responsabilidad, con lealtad y patriotismo.
Esa confianza que se renovó cuando me eligió para que lo acompañe como su vicepresidente en el Partido Justicialista. Y en el 2007 junto a Cristina me respaldaron para gobernar la provincia de Buenos Aires.
Alcanzamos logros y superamos adversidades a lo largo de todos esos años que hicieron más fuertes aún nuestro vínculo de afecto y respecto desde el punto de vista humano, político e institucional.
Si hay algo que aprendí al lado de Néstor Kirchner durante esa intensa experiencia que compartí con él, es que uno tiene que ser leal a sus convicciones, sobre todo en los momentos más difíciles y en las adversidades.
Néstor, con su tenacidad, trabajo y talento es hoy un hombre reconocido no solamente en Argentina sino también en el mundo. Y es Sudamérica, a través del UNASUR una muestra fehaciente de su lucha y de sus logros.
El pueblo de la provincia de Buenos Aires especialmente, expresó su reconocimiento a este proyecto el domingo último, con un contundente resultado electoral.
Con Néstor y Cristina pudimos llevar cambios y transformaciones a la provincia de Buenos Aires que hoy muestran sus resultados. Políticas sociales inclusivas, industrialización, producción y desendeudamiento, inversión en educación y obras de infraestructura históricas Desde los primeros momentos, Néstor como fundador del proyecto marcó ese camino. Su recuerdo nos alienta a seguir dando cada día más de nosotros hasta que la transformación sea total y cambie la vida de todos para bien y para siempre.
Fue un gran conductor y motivador. Siempre tuvo la claridad para comprender las dificultades que atravesaba nuestra Nación, y durante toda su vida entendió que la Política es la única herramienta que permite a los hombres solucionar pacífica y eficazmente los conflictos de la sociedad.
Su lucha, su entrega y su coraje permanecen en el alma y el corazón del pueblo argentino. Y sigue más presente que nunca porque está Cristina. Su compañera de toda la vida, de su lucha y de sus sueños, su continuidad.
Desde el cielo debe estar viendo que el esfuerzo valió la pena.
Gracias Néstor.
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