Las consecuencias pudieron ser mayores si las llamas alcanzaban una tubería de gas que pasa a centímetros del lugar donde quedaron los restos de la fogata. Además, el establecimiento quedó incomunicado, ya que los autores también robaron el cableado telefónico.
Algunos testigos señalaron que el fin de semana, observaron movimientos en el techo de la sede ubicada en Falucho al 800 y que se trataba de niños de muy corta edad.
El desorden y los objetos faltantes fueron advertidos el lunes cuando las autoridades abrieron las instalaciones. Los materiales sustraídos se encontraban en un aula cuyas ventanas dan a un patio interno, por lo que se deduce que los autores del hecho accedieron a este espacio por el techo, rompieron varios vidrios y sustrajeron, a través de las rejas, los elementos que se encontraban cerca de las ventanas.
En diálogo con LA Opinón, la directora del Jardín, Sonia Perrone, se mostró angustiada por los daños y la pérdida del material didáctico: “Son cosas que no tienen valor económico pero sí didáctico y también afectivo porque los chicos cuidan y tienen mucho aprecio por esos objetos. El aula por ahora está clausurada porque al romperse los vidrios, pequeños fragmentos se mezclaron con los juguetes y hasta que no limpiemos toda la habitación no será habilitada”.
Los responsables del hecho también sustrajeron algunos metros de cable de teléfono, otro elemento que no tiene demasiado valor de venta y que ocasiona un serio inconveniente para la institución que quedó incomunicada.
Sin embargo, la directora explicó que “el daño mayor fue en el techo del establecimiento, donde hicieron fuego debajo de la casilla del tanque de agua, ocasionando el derretimiento de un caño de plástico que abastece a la institución. Además, a centímetros, pasa la tubería de gas, lo que podría haber ocasionado un peligro para todo el barrio y para ellos mismos”.
En la pared de la casilla se puede observar el tizne y los restos de la fogata en el piso, muy cerca de un caño de gas, como puede verse en la foto que acompaña esta nota. Incluso es posible que el fuego se haya apagado por la pérdida de agua del caño derretido.
En otro sector del techo, se ven los restos de otra fogata, por lo que se deduce que los autores del hecho estuvieron allí un tiempo prudencial.(DIB).
| 
