"Hay atrasos en los pagos" -aceptó- "lo habíamos podido regularizar pero con el pago del aguinaldo nos volvimos a caer un poco, pero vamos remontando y se va a ir normalizando".
Luego el presidente comunal minimizó el conflicto indicando que "nunca fue un problema tan grave, fue más lo que se politizó y lo que se expresó de maneras no correspondiente de lo que sucedió en realidad".
Sciamaro considera que "cualquiera puede cuestionar a cualquiera" pero que después "hay que presentar las pruebas. En mi caso hay denuncias contra mí que han presentado el año pasado. Yo aporté al juez todos los elementos que me solicitó y por eso estoy muy tranquilo, porque nunca actué de mala fe.
Por ahí las cosas salieron mal. Los empleados tienen derecho a cobrar en tiempo y forma. Pero yo entiendo que se ha exagerado. Hay gente que se ha querido aprovechar políticamente" opinó. Con respecto a la posible intervención, el justicialista admitió saber que el tema está siendo tratado por la Cámara alta.
Sin embargo, cree que "se debería dejar que uno termine el mandato, porque es lo que corresponde, y que después la justicia decida si soy culpable o no". Posteriormente manifestó que hay otros lugares con "conflictos mucho más graves y no se les ha dado la misma atención, no creo que sea tan grave unos días de atraso en el pago de los sueldos.
A alguno se le ha puesto en la cabeza que el objetivo sea sacarme antes de tiempo. Creo que algunos legisladores del socialismo deberían dejarse de joder y que esto siga por el camino que corresponde, que es el 10 de diciembre, cuando entregue la Comuna como corresponde" declaró Sciamaro. Por último, aconsejó al socialismo "mirar algunas comunas que están en situaciones muchísimo más graves que la de Hughes".
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