(GEI/AEN) –Organizaciones ambientalistas de todo el país celebraron el anuncio del gobernador chaqueño Jorge Capitanich, de convertir las 148.000 hectáreas de la estancia La Fidelidad, en un parque nacional. La decisión cuenta con el apoyo de la Administración de Parques Nacionales (APN). Junto con otras 105.000 hectáreas en la provincia de Formosa, La Fidelidad constituye el último reservorio del Gran Chaco con una notable biodiversidad, donde viven especies en riesgo de extinción.
En 1996, APN había iniciado gestiones para crear el parque nacional. Por eso en enero, tras el asesinato de su dueño, el empresario Manuel Roseo, el ministro de Turismo Enrique Meyer expresó a Capitanich el interés de la Nación en retomar la iniciativa. Roseo prácticamente no había hecho explotación de su propiedad, y fue ese valor ambiental lo que llevó a numerosas organizaciones a lanzar una campaña. Entretanto, en dos juzgados de Chaco se sustancian las causas de quienes pretenden la herencia de Roseo.
Hace un mes, la Legislatura chaqueña había definido esas 148.000 hectáreas como “reserva de recursos”. Esta semana, el gobernador Capitanich anunció el envío a la Legislatura de un proyecto de ley que declara el predio “de utilidad pública y sujeto a expropiación”, a los fines de la creación del Parque Nacional La Fidelidad.
Apuesta colectiva
El proyecto contempla también la tasación del terreno, la creación de un fideicomiso de compra, y la disposición de un monto indemnizatorio para quienes la justicia determine como los herederos. En ese sentido, la presidenta de APN, Patricia Gandini, concretó una donación de 2,5 millones de pesos para inaugurar ese fondo fiduciario –al que podrán aportar organizaciones civiles, empresas y la ciudadanía-, destinado a afrontar la indemnización. “Es la primera iniciativa por suscripción popular, y por eso la población está dando un gran paso en la protección de los ecosistemas”, destacó Gandini.
Se descuenta que el proyecto será aprobado a la brevedad por los legisladores chaqueños, y luego girado al Congreso de la Nación. Otro es el ritmo, en cambio, de la protección de las 105.000 hectáreas en territorio de Formosa. El gobernador Gildo Insfrán, enviará un proyecto de ley para recategorizar una franja de 30.000 hectáreas sobre el río Bermejo como zona roja (intangible) según la Ley de Bosques. Las 75.000 hectáreas restantes estarán en amarillo (explotación sustentable), lo que implica una protección menor.
|
