Ha sido la más querida y la más odiada, si, María Eva Duarte de Perón, nuestra Evita, ella fue un blanco de los peores ataques al peronismo: la atacaron por las formas, por el desenfado, por la moral, por el aspecto y finalmente se regocijaron con su enfermedad.
Pero con su grandeza y por su fanatismo supo comprender como nadie las necesidades del pueblo y trabajó incansablemente para ayudar a quiénes más sufrían, sus descamisados». Se realizó un minuto de silencio.
Se colocó una ofrenda floral en el busto que recuerda a Evita que estuvo a cargo de mujeres militantes. El vice-presidente del Partido Justicialista y candidato a intendente, Mauricio Coliqueo, pronunció palabras del último escrito de EVA y cerró el recordatorio con un mensaje de agradecimiento a toda la militancia y en especial a las mujeres que llevan adelante muchas actividades en la sede partidaria.
|