En la reunión Gran Bretaña propuso incorporar en el texto que las restricciones a las exportaciones de cereales son la causa de la volatilidad de los precios de los commodities.
"Nosotros planteamos que el efecto nocivo de la volatilidad de los precios es la falta de transparencia del mercado, el cambio estructural del comercio de estos productos, la economía mundial y los subsidios a los productores por parte de los países desarrollados", apuntó Domínguez.
"El BRIC, (Brasil, Rusia, India, China) más Indonesia, acompañaron la postura de la Argentina. Como consecuencia de esto y para evitar la falta de consenso de este debate agrícola, el Ministro francés, Bruno Le Maire, alineó a Gran Bretaña a la posición de no objetar las restricciones a las exportaciones agrícolas", indicó el Ministro Argentino.
Por su parte, Estados Unidos también se inclinó en la revisión de la política de subsidios. Asimismo, uno de los puntos destacados de esta reunión es la eliminación del concepto de regulación de mercado como instrumento para reducir la volatilidad de los precios.
En cambio, se logró consenso en que el instrumento a utilizar es una mayor producción y productividad en pos de una mayor seguridad alimentaria mundial.
"Todos los estudios nos indican que los precios se mantendrán a niveles elevados, por lo que debemos saber hacer frente a este nuevo escenario internacional con mas inversión y producción en agricultura", apuntó Domínguez frente a sus pares en el G-20.
En otro párrafo de su discurso, Domínguez hizo referencia al trabajo que lleva adelante el Plan Estratégico Agrolaimentario y agroindustrial 2010-2020, a través del cual la Argentina, un país de 44 millones de habitantes, produce alimentos para 450 millones de personas.
En la última década -expresó- “hemos incrementado la producción de granos de 67 millones de toneladas a más de 100 millones de toneladas y se abre un camino de crecimiento donde la meta es llegar a duplicar ese volumen en la próxima década, incorporando tecnología y tierra cultivables al proceso productivo de la Argentina.
En los últimos 10 años hemos casi triplicado nuestras exportaciones de commodities y manufacturas de origen agropecuario, pasando de 13.000 millones de dólares en el año 2000 a 37.000 millones en 2010".
|