El grupo de trabajo de la doctora Vanesa Rawe fue de los primeros en Argentina en implementar una novedosa tecnología llamada “Columnas de Anexinas V” que selecciona espermatozoides de buena calidad desde una muestra en que la que abundan espermatozoides con ADN fragmentado, los que no logran fecundar un óvulo.
“Su uso permite mejorar muestras de espermatozoides afectadas ya que se enriquece la muestra en células sanas y como consecuencia la probabilidad de incrementar las tasas de éxito de la fertilización in vitro”, señala la doctora Rawe, especialista en reproducción de la UBA y posdoctorada en la Universidad de Medicina de Pittsburgh, en Estados Unidos.
Y explica, “la técnica consiste en incubar proteínas anexina V con la muestra espermática afectada. Estas proteínas se pegan únicamente a los espermatozoides con anomalías ya que tienen afinidad por la fosfatidilserina, unas estructuras (fosfolípidos) presentes en la superficie de espermatozoides dañados.
Posteriormente, se aplica una especie de imán que atrae las proteínas anexina V que previamente están adheridas a microesferas de metal recubiertas de un polímero biodegradable. De este modo, los espermatozoides con anomalías quedan pegados a las paredes de la columna y los no afectados fluirán para luego ser recuperados y utilizados en una técnica de reproducción asistida.”
|