Tercero se ubica Olimpo que hacía tres que no ganaba pero derrotó a Huracán en su estadio y es sin dudas la revelación. Con su buena campaña complica al "Globo" y a Gimnasia de La Plata. También a River e Independiente. Los de Avellaneda no paran de caer por el tobogán. Mohamed no logra encontrarle solución a los problemas del equipo.
Por su parte River no puede salir del laberinto. Y el fantasma de la Promoción lo acecha. Venía de ganarle a Racing en Avellaneda con un hombre menos más de 45 minutos. Pero perdió en el Monumental con All Boys, que dio el golpe de la jornada.
Es cierto que no lo mereció porque los de Nuñez crearon más situaciones. Pero el fútbol no se rige por merecimientos sino por resultados. Además J.J. López volvió a cometer errores con los cambios. Dejó a Buonannote en el campo durante casi todo el partido en vez del ingreso por Ballón.
La idea del técnico es defender. Y cuando juega de local queda expuesto al atacar. Tanto es así que los 3 partidos que perdió fueron en su casa. Por ahora el balance del entrenador es bueno en cuanto a los números.
En 19 partidos perdió en 4 oportunidades. Igualmente por momentos le falta dar un golpe de audacia y atrevimiento a su equipo. Y el domingo tendrá una parada complicada. Nada mas y nada menos que el superclásico con Boca.
El enfrentamiento parece devaluado por lo hecho por ambos conjuntos. Pero no deja de ser un clásico. Tiene muchos condimentos. Si gana el xeneise puede dejarlo a su eterno rival en la Promoción. Además será la última escena en un enfrentamiento contra River para la película de Martín Palermo.
Llega mejor Boca pero cuidado que River de visitante mostró mayor rendimiento. Boca tiene a Riquelme. River a Lamela y Pavone que deberá afinar su puntería sino tendrá una tarde para el olvido. Los dos técnicos privilegian la parte defensiva. Pero saben que necesitan ganarse el consenso de sus simpatizantes. Aunque River tiene mucho más que perder.
El final de la nota será como el arranque. Dedicado al mejor equipo de Argentina: Vélez. Pasó a cuartos de final en la Copa Libertadores eliminando al siempre difícil Liga de Quito. Y lo hizo ganando acá y allá. Sin recibir goles en contra. Por el momento demostró que si se quiere se puede jugar dos cosas a la vez.
En el torneo doméstico sacó cuatro puntos de diferencia. En consecuencia tiene margen para realizar una rotación de jugadores. Igualmente el final no está escrito. Y como siempre decimos en la mediocridad cualquiera le gana a cualquiera. (G. C.)
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