El cuerpo de la niña, Priscilla Scheiner, fue hallado ayer en un monte de la localidad de Ramallo, y los padres de la pequeña habían dicho que el tío abuelo había estado con ella.
El hombre, identificado como Ramón Almirón, de 56 años, fue descubierto mientras rezaba en el interior de la Basílica de Luján, y resultó aprehendido por personal de la Delegación Departamental de Mercedes. Vecinos de la casa de la familia de la menor indicaron que Almirón solía jactarse de tener una relación con la menor, aunque para la Justicia el hombre abusaba de la pequeña.
El cuerpo de la nena, con signos de haber recibido al menos dos heridas de arma blanca en el pecho, fue encontrado en un campo con árboles de eucaliptus situado sobre la calle Oliva, de esa localidad del norte del territorio bonaerense.
"Hemos hallado el cuerpo de la menor. Ha sido asesinada por una persona de su entorno íntimo familiar", reveló un comisario a cargo del caso, en diálogo con la prensa.
Según trascendió, el hombre apresado ya presentaba antecedentes previos por abuso sexual, pero por pedido de la madre de la niña, domiciliada en San Nicolás, Priscila había quedado a su cuidado. Aparentemente, el hombre pasó el feriado de Semana Santa junto a su sobrina nieta y según se supo la última vez que fueron vistos ambos iban caminando por Ramallo.
También se conoció que el hombre fue asistido en el hospital San Felipe, en Ramallo, con cortes en sus muñecas, producto de un aparento intento de suicidio posterior al crimen de la nena.
Otro dato que trascendió en las últimas horas dio cuenta de la existencia de una carta, supuestamente escrita por este familiar, que habla de muerte y de un potencial suicidio a raíz de cortarse las venas. El caso es investigado por personal de la comisaría de Ramallo y la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de San Nicolás. (DIB)
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