(GEI)- "Si vamos a ganar las elecciones va a ser con el apoyo de millones que ni son radicales ni se sienten cerca de nosotros. Sin el radicalismo no arrancamos pero con el radicalismo solamente no llegamos", enfatizó el legislador mendocino que desde el arranque de su discurso, buscó despegarse de Alfonsín: "Prefiero que ustedes mismos establezcan la diferencia con Alfonsín, yo sólo me llamo Sanz".
Y continuó: "No podemos pedirles a los que ya no están que nos señalen el camino, yo no voy a pedir el voto de la nostalgia, voy a pedir el voto de la esperanza".
En este sentido, se mostró como la alternativa al kirchnerismo y remarcó que él tiene “vocación de país” a diferencia del oficialismo que, según indicó, “sólo tiene vocación de poder".
"Muchos piensan que no nos van a dejar gobernar. Que hay algunos poderosos que deciden quienes pueden gobernar. Me refiero a algunos que dicen respetar a los trabajadores cuando en realidad se aprovechan del trabajo de otros. Sé que es algo que preocupa, porque en el pasado sucedieron cosas que nadie quiere que se vuelvan a repetir", apuntó Sanz.
Asimismo, consideró que la inseguridad es el principal problema que afecta al país por lo que manifestó: "Yo me voy a hacer cargo".
"Usted tiene derecho a que su hijo vuelva tranquilo del colegio, usted tiene derecho a que nadie se considere dueño de la calle para ocuparla ilegalmente y yo tengo el deber de garantizarle a usted ese derecho", agregó.
En tanto, sobre la inflación advirtió que "jugar con eso es jugar con fuego”. “Sólo por esto ya estaría justificado sustituir a este Gobierno", completó.
Con la consigna de que es el candidato del futuro, Sanz hizo que por primera vez blogueros y twitteros tengan un papel protagónico en un acto de campaña y dispuso en el teatro un lugar especialmente preparado para ellos.
La convocatoria ocurre a casi tres meses de que su adversario interno, Ricardo Alfonsín, hiciera lo propio con un masivo acto en Avenida de Mayo.
Alfonsín y Sanz se enfrentarán en la preinterna partidaria del 30 de abril. Quien logre imponerse en esa instancia disputará en las primarias de agosto la candidatura presidencial de la UCR frente a Julio Cobos, si es que el vicepresidente, finalmente decide ir por la presidencia.
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