La medida regirá en forma retroactiva al 1º de enero de este año y comprenderá a la totalidad de los agentes de ambas fuerzas siempre y cuando estén actualmente en servicio.
La decisión de la Provincia, entró en vigencia con la publicación en el Boletín Oficial de un decreto del ministerio de Justicia y Seguridad.
El "incentivo" tendrá la forma de una suma no remunerativa y no bonificable de 500 pesos, es decir, no estará sujeta a descuentos previsionales ni de obra social. Pero además, se abonará sólo a quienes "se encuentren a la fecha en actividad y cumpliendo con la prestación efectiva de servicios". De esta forma, el plus no será percibido por los retirados de ninguna de las dos fuerzas.
En el decreto, se destaca que "el personal de las fuerzas de seguridad debe cumplir, en muchos casos y según las dependencias en que revistan, servicios extraordinarios para el sostenimiento de la seguridad pública, a fin de brindar a los habitantes de la Provincia el pleno goce y ejercicio de sus derechos, libertades y garantías constitucionales".
El ministro Ricardo Casal había anunciado que se estudiaba el pago del incentivo en los primeros días de diciembre, en medio de una fuerte polémica desatada por los sueldos que cobran los policías bonaerenses.
En aquel momento, la versión sobre la "fuga" de efectivos provinciales hacia otras fuerzas de seguridad, en particular a la Metropolitana que está creando el gobierno de Mauricio Macri en la capital federal y cuyos efectivos cobran sueldos bastante superiores en relación a sus pares bonaerenses, generó un fuerte revuelo y puso sobre el tapete el "retraso" salarial en la Policía.
En ese marco, Casal concurrió a una reunión con los integrantes de la comisión de Seguridad del Senado, a quienes les dijo que estaba en estudio el pago de un "incentivo" para los agentes; medida que ahora se terminó confirmando con la publicación del decreto 54 en el Boletín Oficial
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