Según el informe, con algo más del 75 por ciento del área maicera sembrada, crecería a 3,85 millones de hectáreas la intención de cobertura de esta forrajera para la gruesa.
A instancias de los rindes obtenidos en las últimas cinco campañas agrícolas y restando el tonelaje de granos que se destinará a la ganadería, la campaña cerraría con unos 22 millones de toneladas de maíz para el circuito comercial.
En el caso de la soja, la superficie a cubrir rondaría las 18,7 millones de hectáreas, superando ligeramente en más de 30 mil hectáreas el área de siembra alcanzada en la campaña 2009-2010.
De acuerdo con el informe GEA, esto marcaría un “nuevo récord” en los campos sojeros, al tiempo que se constata una mayor participación de la oleaginosa de segunda, contra el registrado en el ciclo anterior.
Así, las expectativas de los rindes bajan respecto a la campaña anterior y, según los especialistas, la cosecha de soja ascendería a 49,5 millones de toneladas de granos.
Hasta el momento los campos sembrados con oleaginosa suma la tercera parte del área a implantar, pese a que en los primeros días de noviembre se registró cierto retraso o paralización en las labores de siembra.
Por caso, este parate pudo constatarse en campos de Santa Fe, Córdoba y en el norte de la provincia de Buenos Aires.
Asimismo, la siembra sojera en el orden nacional comenzó temprano durante la presente campaña gracias al beneficio que le reportó en clima y las condiciones de humedad, y pese a todo se mantiene una pequeña diferencia a favor respecto del progreso que presentan las labores a igual fecha del ciclo anterior.
En las áreas mencionadas, se observa un incremento de la presencia de plagas y la falta de pronóstico ciertos para contar con lluvias en el área núcleo, hecho que repercute sobre los niveles de ansiedad de los productores de estas zonas.
Para el caso del área maicera y respecto a la previsión de 3,85 millones de hectáreas a implantar en la campaña 2010-2011, persiste la posibilidad de que se ajusten nuevamente el área de siembra.
Esto va a depender de la evolución y resultados que se obtengan en las labores de siembra que aún restan por cumplir durante los meses próximos de diciembre y enero, y en especial en campos de Chaco y Santiago del Estero. (DIB)
|