(Dypra/GEI) - La madrugada del 15 de julio de 2010 quedará marcada en la historia argentina como un momento importante. Es que luego de una larga discusión en la sociedad y una intensa lucha por parte de diversos sectores, el Parlamento argentino aprobaba el matrimonio igualitario en el país, donde ya no importa la condición ni la inclinación sexual para contraer enlace.
La medida fue sancionada en el Senado por 33 votos afirmativos, 27 en contra y 3 abstenciones, y ya contaba con media sanción de la Cámara de Diputados
De esta manera, Argentina se convirtió en el país número 10 en todo el mundo y el pionero en América Latina, precedido solamente por Canadá en todo el continente americano.
La ley promueve el “matrimonio igualitario” con atribuciones equivalentes para parejas gay y heterosexuales.
Con la aprobación de la ley se modificará el Código Civil argentino, que en su artículo 2 establece que el casamiento debe concretarse entre individuos de distinto género.
Además la ley contempla la posibilidad de la adopción de menores por parte de las parejas homosexuales, uno de los temas más polémicos para las voces críticas del proyecto.
Primer casamiento
Una vez aprobada la ley, muchas fueron las parejas gays que se lanzaron a dar el “sí”. Por lo que el primer casamiento homosexual ya tiene fecha. Será el próximo viernes 13 de agosto, cuando se celebre el matrimonio entre el representante de artistas Alejandro Vanelli y el actor Ernesto Larrese, que se concretará en el Registro Civil del barrio porteño de Palermo, según anunció la titular de la Federación Argentina de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Trans (FALGBT), María Rachid.
Yo no te caso
Alberto Arias y Marta Covella, jueces de Entre Ríos y La Pampa respectivamente, aseguraron que se negarán a casar a parejas homosexuales, a pesar de haberse convertido en ley el matrimonio igualitario.
“Así como la Ley de Salud Reprocductiva autoriza a los médicos a no practircar un aborto por objeción de conciencia, yo me imagino que nadie se va a sentir ofendido si algún jefe de Registro Civil, como en mi caso, dice: “no lo voy a hacer”, comparó el entrerriano.
Mientras que la jueza Covella mostró su rechazo por considerar que el matrimonio entre personas del mismo sexo es “contrario a la ley de Dios”.
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