De cara a las elecciones partidarias que se definirán las autoridades provinciales, y que enfrentará a Miguel Bazze –apoyado por Alfonsín- y a Eduardo Santín –impulsado por el sector de Leopoldo Moreau y Federico Storani-, el alfonsinismo intentará, como adelantó DIB el lunes, impedir que unos 56 mil afiliados que aparecen anotados en partidos de alcance provincial compitan en la elección, luego que la junta partidaria denegara esa acción.
El pedido del alfonsinismo fue presentado el lunes, luego de que la Junta Electoral permitiera que 56 mil de los 150 mil afiliados y dirigentes radicales que habían quedado inhabilitados para participar de la interna finalmente lo hicieran.
Desde ese órgano indicaron que la decisión estaba fundada en que los reincorporados habían aparecido en listados de partidos provinciales o vecinales, y que por ello no se sabía a ciencia cierta cuántos realmente habían prestado su consentimiento.
Pero el sector que lidera Ricardo Alfonsín decidió apelar la decisión, sosteniendo por lo bajo que los afiliados a “partidos vecinales” son en realidad adherentes al intendente de San Isidro, Gustavo Posee, que apoya la candidatura de Santín.
Por ello, ahora presentó un recurso ante la Justicia Electoral para que finalmente depure el padrón partidario de acuerdo a la primera decisión de la junta partidaria, que luego de entrecruzar datos con el resto de las fuerzas políticas nacionales, bonaerenses y municipales eliminó de la elección a 150 mil personas.
Al conocer la decisión, el candidato alfonsinista, Miguel Bazze, indicó que “son cosas absolutamente lógicas las que planteamos y es la única forma legal, porque ser afiliado a dos partidos está prohibido”. Bazze acusó a Moreau y Storani de “manejar” la junta electoral partidaria a su conveniencia. Bazze señaló que el tema debe ser resuelto antes de las elecciones del 6 de junio, puesto que los afiliados ahora incluidos pueden “estar influidos por líneas internas de la UCR”.
En tanto, los representantes de la Junta Electoral radical justificaron su negativa por “cuestiones de tiempo”, ya que indicaron que “los afiliados no alcanzarían a renunciar a sus otras adhesiones antes del 6 de junio”. Ahora, la Justicia Electoral tendrá 48 horas para decidir, plazo que podrá ser estirado. (DIB)
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