El lunes se produjo una maratónica jornada vinculada a la causa que se investiga por la muerte de Giuliana Jiménez y Miguel Portugal los jóvenes muertos en Baradero. Por la sede de la Fiscalía Nº 5 de San Pedro desfilaron testigos, familiares y el ex Inspector General de Tránsito Pablo Scarfoni. El Dr. Daniel Castiñeiras fue quien presenció todos los testimonios y efectuó unas treinta preguntas al ex funcionario. "Fueron importantes los testimonios que hemos conseguido en esta jornada", dijo el profesional.
Con respecto a la interpelación de Scarfoni, Castiñeiras aseguró: "Dijo que tomó conocimiento sobre lo sucedido a través de una comunicación que mantuvo con la señora Luciana Romero la noche del accidente. En su presentación ha dado cuenta que la camioneta municipal se dio a la fuga, a través de los dichos que le comentó la inspectora Romero.
Ella se lo comentó vía radio esa misma noche, momentos después". "Dijo que si el hubiera estado en el momento del hecho hubiera detenido la marcha y hubiera atendido a las víctimas", expresó el abogado. "Esto es muy importante porque hasta el día de hoy eso estaba acreditado a través de algunos dichos, ahora lo acreditó Scarfoni".
Con respecto a las otras personas Castiñeiras dijo: "Los tres testigos que se presentaron perecen haberse puesto de acuerdo porque ninguno de los tres vio lo que pasó, parece que la camioneta hubiera desaparecido por arte de magia". La presencia de Scarfoni en la Fiscalía atrajo a los familiares de las víctimas, quienes aguardaron pacientemente la finalización de la jornada.
Al advertir que el ex Inspector General había arribado en un auto oficial mostraron su disconformidad y fue pero aun cuando se retiró. "No voy a dar declaraciones", dijo Scarfoni a un periodista de La Radio 92.3, y prácticamente se zambulló a un patrullero que lo recogió en las puertas de la fiscalía en medio de gritos y reproches por parte de los familiares presentes.
Lo particular del caso y para despejar dudas sucedió momentos después, cuando Scarfoni arribó a la Comisaría y se retiró por la parte trasera de la dependencia policial, subiéndose al Ford Mondeo "oficial" que lo aguardaba creyendo que nadie había advertido su presencia. La opinión San Pedro)
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