Como esa medida primero fue suspendida por orden judicial y luego derogada por una ley, ahora la Provincia está reconociendo ese saldo como cancelación de las cuotas actuales de estos tributos.
La imputación de esos pagos efectuados cuando estuvo vigente la medida luego derogada, comenzó a registrarse en las boletas del impuesto Inmobiliario y Automotor del mes de enero y febrero, respectivamente, cuando muchos contribuyentes constataron que el monto a pagar era de 0 pesos en virtud de la devolución de esos adicionales ya abonados.
Los adicionales a los impuestos Inmobiliario y a los Automotores habían sido puesto en práctica por ARBA para aquellas personas físicas y sucesiones indivisas contribuyentes de esos tributos con bienes en Argentina o en el exterior cuya valor en conjunto superara los 500 mil pesos.
La medida se aplicó durante el último período de la gestión de Santiago Montoya al frente del organismo recaudador en respuesta a la baja adhesión al Impuesto a la Riqueza que se cobra a nivel nacional (DIB)
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