Tampoco se había pronunciado
sobre la actitud de
la jueza María José Sarmiento
que decidió restituir a Martín
Redrado en la presidencia del
Central después de que la presidenta,
Cristina Fernández,
lo echara por decreto. Sin embargo,
el avance del caso y el
escándalo mediático generado
en rededor de las reservas instaron
a hablar a Zafaroni.
En una entrevista con Página/
12, el juez fue categórico:
“No puedo opinar en concreto
sobre el caso, pero sin duda que
existe un largo camino de judicialización
de la política, o sea,
forma parte de una práctica
que se ha vuelto mundial, por
supuesto, en que toda cuestión
política o parcialmente política
se deriva a la Justicia. Creo
que ésta es una tendencia peligrosa
para la imagen del Poder
Judicial. Sin referirme en
concreto a ningún caso, sino
como orientación general de
política judicial, estimo que
debemos preservar la Justicia
y devolver los problemas a los
verdaderos responsables, para
que los resuelvan en sus ámbitos
naturales”.
No son pocos, los que en
el último tiempo insisten en
señalar que al Gobierno sólo
lo desvela la concentración
de más y mayor poder. Zafaroni,
menos apasionado y
más racional, sostiene que no
se trata de que en Argentina
el Ejecutivo no acepte la independencia
de poderes, sino
que constitucionalmente en
el país lo que existe es una división
de poderes que permanecen
en lucha constante.
Codazos inevitables
Para él no se trata de creer o
no creer en la independencia
de poderes, sino de entender
que “La tendencia del Poder
Ejecutivo a preponderar es
histórica y está condicionada
por el sistema presidencialista,
no hay vuelta. Puede que
el Poder Ejecutivo lo ocupe
quien tenga más o menos vocación
para eso, pero dejando
de lado las coyunturas, siempre
hay y habrá algunos codazos
que son inevitables”.
Sobre su visión respecto de
que en el mundo existe una
tendencia a resolver en el ámbito
judicial los problemas que
se engendran en el político,
explicó: “Hay problemas que
no saben cómo resolver y los
derivan al Judicial que, por su
naturaleza no los puede resolver.
En esos casos lo mejor es
devolverlos urgentemente, pues
de lo contrario el Poder Judicial
carga con el fracaso de no hallarle
solución. En esta materia
tenemos que cuidarnos mucho
del narcisismo y de la omnipotencia.
En otros casos se procura
publicidad, éste es siempre
un buen escenario, los medios
suelen cubrir todo lo que pasa,
especialmente cuando tiene ribetes
de escándalo. Por último,
no podemos olvidar una característica
de la política en todo el
mundo, se ha vuelto mediática.
Cada político asume un papel
y queda preso de ese papel, no
puede cambiar la imagen”.
Política por TV
Sin limitarse a la cuestión del
Banco Central y las denuncias
cruzadas entre el Gobierno,
el titular del BCRA, Martín
Redrado, la jueza María José
Sarmiento y legisladores de la
oposición, Zafaroni habló de la
política, los políticos y las reglas
de juego actuales: “Hoy la política
se hace en la televisión, ya
no hay contacto directo con las
bases, se desprecian la militancia
y el trabajo barrial. No es la
política que conocí, es otra cosa.
Hoy nadie se esfuerza ni casi
se mata, como Alfonsín, para
llegar a hablarles a cincuenta
personas en un pueblo de provincia.
Y tribunales es un buen
marco para la televisión”.
Para el juez de la Corte hablar
de la Justicia en general para
referirse al comportamiento de
algunos jueces en particular es
una abstracción. Destacó que,
en general, no ve que los jueces
se presten al juego e intereses de
políticos determinados, lo que
señaló como positivo por la salud
de la función. Pero también
señaló: “Sería bueno, por otro
lado, que tampoco se quiera
leer cada sentencia como movida
por funcionalidades ni que
los políticos jueguen a ensuciar
a cualquiera porque no le gusta
lo que resolvió”.
El problema es político
Como ejemplo de la imposibilidad
de resolver problemas
políticos por vía judicial
y volviendo al caso del Banco
Central, Zafaroni indicó: “Es
de toda evidencia que más allá
de lo jurídico hay un problema
político, cualquiera lo ve.
Lo único que podrá resolver la
Justicia es el planteo jurídico,
pero el problema político no lo
pueden resolver los jueces ni les
corresponde”.
Consultado respecto del futuro
de Martín Redrado en la
presidencia del Banco Central
y el rol que podría jugar la Corte
Suprema, Zafaroni explicó
que “De oficio la Corte no puede
hacer nada, todo dependerá
de quiénes y qué se pueda o se
quiera plantear, puedo imaginar
muchas cosas, pero cualquiera
que diga parecería un asesoramiento
público y gratuito y eso
no lo puedo hacer. Pero, siendo
realista, insisto en que más allá
de la cuestión jurídica, es obvio
que hay un problema político y
los tiempos de la Justicia no son
los de la política. Me imagino
que se hallará alguna solución
en ese plano”.
En la maraña de declaraciones
y denuncias, la del
Gobierno contra la jueza
María José Sarmiento llamó
la atención de algunos sectores
de la justicia. Para Zafaroni
esa jugada es “poco inteligente,
pero no soy quién
para indicarle a nadie lo que
debe hacer o no hacer.
| 
