Los autos valuados por debajo de ese monto, no tendrán aumento y las boletas que ya se están distribuyendo incluyen descuentos por buen contribuyente y por pago contado. Para el primero de los casos se aplica deducción de 5 por ciento y si se abona el monto anual se obtiene un descuento de 10 por ciento por pago anticipado.
Para el impuesto Inmobiliario Urbano, cuyo primer vencimiento operará en febrero, las boletas tendrán un aumento de 20 por ciento respecto a los valores de 2009, si las propiedades tienen una valuación fiscal por encima de los 100 mil pesos, mientras que serán eximidas de pagar el tributo aquellas unidades habitacionales valuadas en menos de 25 mil pesos.
La reforma fiscal incorpora incrementos en los valores del Inmobiliario Rural que no superarán el 39 por ciento, con un mínimo de 20, y exime del pago de esta obligación fiscal a los doce distritos del sudoeste bonaerenses afectados por una prolongada sequía.
A partir de este año la provincia comenzará a percibir un Impuesto a la Herencia, que deberán pagar las personas físicas y jurídicas que resulten beneficiarias de sucesiones o de transmisión gratuita de bienes a los que se les aplicará una alícuota que oscila entre 5 y 8,7 por ciento.
Pero estarán exentos del impuesto aquellas herencias por valores de bienes que no superen los 3 millones de pesos.
Además se modifica el tributo que se abona en la compraventa de autos usados, que en lugar de pagar el impuesto a Ingresos Brutos ahora lo harán a través del Impuesto de Sellos, en el que los Registros de Propiedad del Automotor actuarán como agentes de retención para evitar la evasión. (DIB)
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