Desde el sector señalan que paradójicamente, pese a que cayeron las operaciones los buenos campos agrícolas de la zona de la pampa húmeda siguen con precios estables y en Pergamino, una de las zonas más ricas la hectárea promedia los 12.000 dólares.
Y aclaran que este año se hicieron muy pocas operaciones porque la motivación por invertir es cero, porque hay cambios de reglas de juego todos los días y la sequía también hace lo suyo, desalentando negocios.
Destacan además que la actividad tuvo una fuerte merma en el primer semestre del año y en el segundo semestre se recuperó algo, pero sin llegar a mostrar fluidez. Remarcan también que las malas políticas agropecuarias del Gobierno desalentaron inversiones.
Sobre el mantenimiento de los precios afirman que no bajan porque la gente no está dispuesta a vender, no tiene necesidad de vender o no visualiza otras inversiones
En cuanto a la participación de los inversores extranjeros aseguran que por las pésimas políticas agropecuarias de este gobierno muchas grandes inversiones originalmente previstas para la Argentina terminaron concretándose en países como Brasil o Uruguay donde hay mayor seguridad jurídica y reglas más claras. (Infobae)
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