Yo creo que éste es un gran error. No se puede convencer, ni a un nene, que semejante mafia con su peligrosísimo prostíbulo podría instalarse tranquilamente en el corazón de Pergamino cometiendo el más grande crimen de la historia de esta Ciudad sin conocimiento de las autoridades de Pergamino. Es más, prueba de lo que estoy diciendo, es el actual procesamiento que tienen funcionarios del Gobierno de Gutierrez.
Fueron 14 chicas, una solamente de 13 años y otra de 15 (sus edades ya han sido probadas) que fueron engañadas y llevadas ilegalmente desde Paraguay a Pergamino;
Encerradas en el edificio nombrado "Espartacus", esclavizadas y obligadas a prostituirse en beneficio de los rufianes que se encargaron de organizar semejante mercado de carnes femeninas (cuantas más jóvenes mejor).
¿A quien se le puede ocurrir que esto podría suceder sin conocimiento de las autoridades municipales? Pretender esto es intentar tapar el sol con las manos.
Es tal como decía Monseñor Cardelli, nuestro Obispo, en su carta a los Fiscales que intervienen en el caso: "si una de las pequeñas esclavas no se escapaba de Espartacus y hablaba con un Juez en el lejano Posadas: ¿Hasta cuando se habría estado cometiendo este horrendo crimen?.
Recordemos que fue este Juez de Posadas, y no la justicia local quien mandó a la Gendarmería para liberar a estas víctimas y posibilitar su regreso a Paraguay.
Además, resulta inconcebible que los Fiscales de Pergamino aún no hayan procesado, por incumplimiento de los deberes de funcionario público al Intendente Gutierrez y a los jefes policiales del momento quienes en sus narices permitieron que estas orgías macabras con menores se celebraran en las puertas de la Ciudad y a 100 metros de una oficina policial.
Padre Denis Fitzpatrik
DNI 92 798 647
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