La extracción del hígado fue realizada por personal del Centro Único Coordinador de Ablación e Implante (Cucaiba) de la cartera sanitaria provincial, a un donante fallecido de 53 años que había recibido un trasplante de riñón.
Se trata del primer caso de este tipo en la provincia de Buenos Aires y se da en un contexto de incremento de las tasas de donantes reales y trasplantes en el territorio bonaerense.
Las fuentes señalaron que el período que va de enero a julio de este año registró 104 donantes reales, lo que representa un aumento de 14,5 respecto del mismo período de 2008 y de 38,5 por ciento respecto de igual período de 2007.
La cantidad de donantes por millón de habitantes en la provincia sigue la misma tendencia: 9,1 durante todo 2007, contra 12,1 en 2008 y 6,8 sólo en los primeros siete
meses de 2009.
En ese marco, en cuanto a órganos implantados, hubo 302 durante todo 2007; 469 en 2008 y 234 sólo en lo que va de los primeros siete meses de 2009.
El titular de CUCAIBA, Clemente Raimondi, afirmó que "la donación de órganos para trasplante es un acto solidario con uno mismo, con su familia y con toda la sociedad".
Agregó en esa línea que "cualquier persona puede necesitar en algún momento un órgano o tejido para salvar o mejorar su calidad de vida. Por eso, es necesario tomar conciencia de que la solidaridad de unos es la esperanza de otros". (DIB)
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