La escritora, que es periodista especializada en temas de educación, se sumerge en el nuevo espacio que ha generado la universalización de los medios de comunicación y su incidencia en la sociedad.
“Todos estamos mediatizados”, asegura la autora, que tras su paso por la 35º Feria del Libro de Buenos Aires en abril, el viernes se presentó en la Facultad de Periodismo y Comunicación Social, de la Universidad Nacional de La Plata.
El texto propone al lector hacer un recorrido por varias temáticas como es el impacto de la cultura mediática en la escuela, el rol del Estado en cuanto a la generación de políticas de regulación, el papel de la educación como formadora social, la política como herramienta de cambio y transformación.
El libro, editado por el sello Aique, lo que busca transmitir es que “hoy los medios, más aún la televisión y los contenidos que circulan por internet, nos atraviesan a los ciudadanos y nos están formando y están formando a las nuevas generaciones. Mucho más que las instituciones formales educativas o incluso la familia”, refiere Beltrán.
¿Cómo se percibe en los niños y en los jóvenes el atravesamiento mediático? Se percibe en la manera de hablar, en los gestos, en cómo se vinculan, en la ropa, en lo que tienen y en lo que desean tener; en lo que no tienen y en lo que rechazan.
La autora, que conduce desde hace once años el ciclo “Cátedra Libre” por Radio Nacional, cita un ejemplo: un grupo de alumnas de una escuela primaria de la ciudad de Buenos Aires bailaron en el acto de fin de año de la institución una canción de la serie “Patito Feo”, de alto contenido discriminatorio, ya que la coreografía implicaba separar a “las feas” de “las divinas”. “Los maestros no tomaron esto como un tema para hablar en una clase sobre qué estaba simbolizando, sino que por el contrario se terminó validando institucionalmente. La escuela participó de esto, pero no tomó una postura como escuela”, expresa Beltrán.
¿Esto se produce por falta de una política educacional más profunda relacionada con el tema? Esto debería ser una política de Estado porque ha tomado una entidad que trasciende a la escuela. La ciudadanía está participando socialmente más a través de su accionar en los medios que en las instituciones de la República. El problema es que cualquier país para crecer necesita una herramienta de formación pública, laica, un producto de un proceso democrático, político, pluralista y esto no lo están garantizando los medios de comunicación porque no es su función.
¿Cuál es el rol de la familia en este espacio? Charlando y discutiendo los contenidos que absorben de los medios. La formación de los padres es una responsabilidad más individual. El Estado y la escuela pública tienen una responsabilidad sobre una generación de argentinos.
¿Un programa como “Gran Cuñado” puede condicionar el voto de un ciudadano? Si los medios condicionaran la próxima elección de lo que estaría hablando mal esto, no es de los medios sino de la incapacidad de la clase política de generar un contacto con la gente para lograr transmitirle los candidatos y sus ideas
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