"Ni la mejor policía del mundo ni la maldita policía, la Policía de la Provincia de Buenos Aires", fijó clara postura Scioli en su discurso, durante el que reafirmó su compromiso en la lucha contra el delito con eje en la droga como su "enemigo".
El gobernador explicó que el proyecto de Ley está dirigido a que "cada policía esté siempre listo para servir" y señaló especialmente que "brinda pautas claras para la carrera policial por sobre las decisiones políticas de turno y devuelve jerarquías a los oficiales mayores".
En ese sentido, remarcó que a las instituciones "se las fortalece, se las mejora y se las moderniza, lo que no puede hacerse es maltratarlas o someterlas a falsas antinomias".
"El miedo y las rejas son para los que siembran violencia; para los vecinos de cada barrio debemos reservar la esperanza en una forma de vida que tuvimos y debemos recuperar", subrayó.
Por su parte, el ministro de Seguridad, Carlos Stornelli, se refirió al primer año de gestión y a la decisión "inapelable de no combatir las estadísticas sino el delito y sus causas".
Por eso, destacó el "trabajo con la verdad como prioridad absoluta" y "el dato estadístico real como una eficaz herramienta de trabajo que permite diagnósticos acertados y tratamientos adecuados".
Stornelli afirmó que la Policía de la Provincia "ha estado a la altura de la circunstancia" y remarcó su "calificación y entrega" que han permitido "aumentar enormemente la capacidad operativa de la fuerza y de aprehendidos de diversos delitos; el incremento de procedimientos policiales respecto al año anterior y de detenciones relacionadas con la droga".
Se refirió también al nuevo estatuto policial y explicó que "regulariza la situación de los policías; se atiende a sus necesidades y derechos, y se garantiza que la carrera estará supeditada prioritariamente a la antigüedad, formación y mérito y no a la determinación política de turno".
Hubo un reconocimiento especial durante el acto, por el que el Gobernador entregó el Premio Gobernación de la Provincia de Buenos Aires al Superintendente Norberto López Camelo, a cargo de la Superintendencia de Investigaciones de Drogas Ilícitas.
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