Entre estas discapacidades no sólo están las motrices y mentales, sino también problemas viscerales, de riñón y dificultades respiratorias.
Este programa tiene a su cargo la atención integral de minusválidos con acciones de prevención, tratamiento y rehabilitación y según las proyecciones realizadas en base al censo 2001 en la actualidad sobre un total de algo más de 15 millones de personas, hay en territorio provincial 1.931.944 disca- pacitados.
En Colón el último censo se realizó en l997, sin embargo la información oficial indica que habría 618 personas con discapacidades y que se gestionan pensiones provinciales, nacionales.
Según explicó la directora del Programa Provincial de Rehabilitación (PPR), Cristina Favre, el número de discapaci tados que se registran en el conurbano (1.457.088 sobre una población total de 10.407.773) obedece al mayor impacto de problemáticas tales como la contaminación, los mayores niveles de violencia y marginalidad, el alcoholismo y la drogadicción.
En declaraciones la especialista señaló que aunque son estimaciones “en el Conur bano son mucho más frecuente que en el interior, las drogas en general, pero por sobre todo el paco y los inhalantes generan daños neuronales irreversibles que derivan por ejemplo en retrasos mentales o dificultades de aprendizaje.
Favre dijo también que “Las discapacidades mentales superan claramente a las motoras, no sólo en tertitorio bonaerense sino que es una tendencia que se afianza a nivel mundial”. Según el relevamiento llevado a cabo por el PPR sobre más de 40 mil casos, las patologías mentales suman el 43,7 por ciento, mientras el 36,9 son motoras, el 27,9 viscerales, el 13,2 problemas visuales y el 11,7 auditivos.
El Programa Provincial de Rehabilitación se puso en marcha en 1994, en el marco de la Ley provincial de Personas Discapacitadas (10.592) con el fin de coordinar la atención integral al discapacitado con acciones de prevención, tratamiento y rehabilitación, mediante una Red Asistencial de Rehabilitación conformada en cada una de las 12 regiones sanitarias en que está dividida la provincia. Para ello, el PPR emite un Certificado que permite a la persona discapacitada acceder a los beneficios que prevé la legislación vigente.
A la fecha, el Programa lleva entregados en la provincia alrededor de 800 mil certificados de discapacidad: con ellos, los minusválidos acceden al pase libre en el transporte público, la eximición de impuestos de Rentas, y pensiones del IPS, entre otros.
En la provincia hay 99 juntas médicas locales que se encargan de las certificaciones y las derivaciones de los pacientes a los centros de salud más cercanos a sus domicilios. “El objetivo es avanzar en la descentralización para que haya juntas médicas en los 134 distritos provinciales con el objetivo de tener una llegada mucho más individualizada”, indicó Favre y recordó que cuando se inició el programa sólo contaba con 12 juntas.
Comparativamente, la provincia de Buenos Aires concentra la enorme mayoría de las juntas médicas que funcionan en el país. La siguen capital Federal, con 32; Santa Fe, con 16; y La Rioja , con 9.
Lo mismo ocurre con el número de certificados de discapacidad emitidos: la provincia de Buenos Aires lleva entregados unos 800.000, mientras que la suma total de certificaciones otorgadas por el resto de las provincias del país es de 112.000.
Patologías frecuentes
Las discapacidades más comunes entre los niños que se atienden en los centros de salud de la provincia son la parálisis cerebral, mielo- meningocele (defecto de nacimiento en la columna vertebral y el conducto raquídeo), traumatismos craneoencefálicos, secuelas tumorales del sistema nervioso central, hemiplejías agudas y tortícolis.
Según indicó la jefa de rehabilitación del Hospital de Niños platense “Sor María Ludovica”, Nelly de Larra- ñaga, el 2 por ciento de los discapacitados son niños.
En tanto, entre las patologías de adulto más frecuentes se destacan los accidentes cerebro vasculares, poliomelitis, parálisis flácidas, enfermedades reumáticas, hemiplejías y esclerosis múltiple, amputados, síndrome de lesión medular, parálisis obstétricas y miopatías (enfermedad muscular).
Otro centro de referencia provincial para atención de discapacitados funciona en el hospital “Mi Pueblo” de Florencio Varela y fue creado en 1993.
Allí se atienden las disca- pacidades de segundo nivel de complejidad, que no pueden ser tratadas en los 33 Centros de Atención Primaria que funcionan en ese distrito
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