Nunca se preocupó por el funcionamiento de la estancia “Los Olivos” que está situada en jurisdicción de Hughes provincia de Santa Fe, no tuvo un oficio conocido y nunca trabajó. Lo definen como un bohemio que “le gustaba vivir de noche y dormir de día”. Por estos días, la ciudad se conmovió. La colonense Marta Ofelia de 69 años de edad reclama su paternidad ante la el Juzgado Civil y Comercial Nº 1 de Pergamino, Secretaria de la Familia.
Si Ofelia es la hija de “Pichón” Barcia , estamos ante uno de los casos jurídicos más apasionantes de la historia de nuestra ciudad, por las connotaciones económicas y sociales. La madre de la litigante, Margarita Celli, fallecida el 1º de agosto de l997, habría tenido una relación fugaz con “Pichón” Barcia en 1938. La mujer solamente tenía 16 años.
Margarita Celli trabajaba como doméstica en la casa de la familia Planes- Barcia, ubicada en calle 18 entre 47 y 48.
La historia
El 3 de febrero de 1972, Juan Manuel Barcia, ingresó al baño de la vieja casona y cayó fulminado por un infarto cardiaco. El cuerpo sin vida fue encontrado por su madre Rufina Planes de Barcia. Tenía 55 años, nunca estuvo casado, y hasta ese momento no se le conocía descendencia. Nadie de su entorno o lo que asistieron a los funerales, imaginaba que 36 años después su figura se proyectaría con fuerza en la conversación y recuerdo de los colonenses.
La historia familiar parece extraída de un culebrón mexicano. El abuelo, Cebedeo Planes proviene de una familia patricia y se casó con Felipa Quintanales. El matrimonio contó en su patrimonio con varias propiedades. Un campo en cercanías de la localidad de El Arbolito, en cercanías de la estación de servicio “La Nueva Aurora”. En la década de los ochenta el predio, habría sido vendido a precio de tasación fiscal, presuntamente por las deudas impositivas. También tenía varias casas en Pergamino, una quinta en Ruta 50 y boulevard 17, el campo “El Olivo” de Santa Fe.
Revisando la historia de Barcia se pudo encontrar algunos errores. Juan Manuel Barcia -padre de Pichón- emigró de España, luego de la Primera Guerra Mundial. En algunos escritos se lo cataloga como contador, la tradición oral y amigos de Pichón, lo incluyen como un experto técnico electricista que incluso tenía un pequeño taller a los fondos de la casa de calle 18, luego de casarse con Rufina Planes. Cabe destacar que “Pichón” Barcia pudo heredar esta inclinación dado que fue un radioaficionado que le gustaba “acomodar” sus propios equipos.
El matrimonio Barcia tuvo dos hijos. Uno de ellos murió de tifús en los periódicos ataques de la enfermedad que tenía nuestra ciudad y que cobró en las primeras décadas del siglo veinte, muchas vidas jóvenes.
Las motos
Una de las pasiones de “Pichón” Barcia fueron los “fierros”. En 1938, existían en nuestra ciudad solamente cuatro motos. El excéntrico millonario recibió de regalo de parte de su madre una moto AJS, con la que se dedicaba a recorrer el pueblo y sus alrededores.
Años después cambio la unidad, por una moto INDIAN y la siguió una Dukatti de origen italiano
En el año 1940, seguramente atraído por las crónicas de guerra comenzó su pasión por los aviones. Es así que empieza el curso de piloto para obtener la licencia en el Aero Club de Colón. Se recibe ese mismo año.
Su madre, una vez recibido quiere premiarlo y ayuda a la búsqueda de un avión para dar rienda suelta a la pasión del excéntrico joven.
Los Planes-Barcia finalmente compran un avión construido en nuestro país con licencia inglesa. Se trata de un bimotor marca “El Boyero”. En la Argentina solamente se construyeron 120 unidades. Los mismos fueron distribuidos por los Aeroclub, donde Rufina Planes lo habría comprado.
El avión cuando llegó a nuestra ciudad era guardado en un galpón-hangar, situado en una quinta propiedad de la familia en cercanías de boulevard 17 y Ruta 50.
Unas tres o cuatro veces por semana “Pichón” Barcia lo sacaba y salía a volar recorriendo la región por el término de una hora. Nunca realizó viajes largos.
La tercer pasión fueron los autos. El primer vehículo que tuvo –regalo de Rufina- fue una Cupe, marca Ford, modelo1938 de modelo convertible. Poco después estalló la Segunda Guerra Mundial. Mientras duró la guerra se lo observaba pasear con un Ford 36 capota de lona. También tuvo una Cupé Ford modelo 40 y un Chevrolet 39. Una vez finalizado el conflicto adquirió un auto Stude- baker y después lo seguirían un auto Sport Bugatti y un Rambler de Lujo color crema..
La bohemia
Las investigación realizada por Colón Doce indica que en sus jornadas habituales comenzaba la “noche” en el Club Hispano y las terminaba en una bar que se encontraba abierto en la estación de servicio Panam, ubicada en boulevard 50 y Ruta 8 (hoy calle 9).El estanciero no trabajaba. Sus ingresos provenían de alquileres de casas y arreglos económicos realizados con chacareros en el campo “Los Olivos”.
Sus estudios llegaron a nivel primario. El diploma lo recibió en la Escuela Nº 1. No realizó estudios secundarios. Nunca viajó a Europa y sus vacaciones las realizaba en Mar del Plata, La Cumbre o Río Ceballos, muchas veces acompañado de su madre.
Su bebida preferida era el Whisky por la cual tenía una fuerte debilidad. Las personas que lo conocieron indican que la bebida blanca pudo haber influido en su prematura muerte.
Entre sus hobys se encontraba el de radioficionado. Los viejos operadores de radio lo recuerdan con “apariciones” en rueda de amigos a muy altas horas de la madrugada y donde le gustaba contar cuentos y realizar bromas, dentro de lo permitido en los reglamentos. También ante cualquier pedido era solidario y le gustaba participar en largos concursos con pun- taje que organizaban los Radioclubes.
Una de las debilidades eran los caracoles. En Colón había dos familias conocidas cuyas cocineras lo preparaban y además viajaba a un restaurant de Pergamino por lo menos una vez a la semana para degustar el plato.
Sus dos amores
Los amigos que lo conocieron indican que no fue un hombre comúnmente denominado “mujeriego”. Su carácter era fuerte y dominante. En su vida tuvo dos parejas conocidas. La primera fue Elida “B”. La mujer en 1968, sufrió un accidente automovilístico cuando se trasladaba a la localidad de Sarasa. Los golpes en la columna vertebral la dejaron cuadripléjica y finalmente falleció el 6 de julio de l971.
La segunda pareja fue Juanita (N). Hoy tendría 81 años y hace muchos años se trasladó a la Capital Federal.
El mayor obstáculo para contraer matrimonio fue Rufina Planes dice que le decía “No te cases, eso solo de traerá inconvenientes”.
Uno de los hechos más significados de esta historia, y que estarían en por lo menos un testimonio de la causa judicial sería la posibilidad de una enfermedad venérea de “Pichón” y la forma que Rufina Planes pensaba como curarla. En este aspecto el la génesis de esta causa judicial y los aspectos sicofísicos en cada uno de los actores serían devastadores. (continuara).
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