El viernes 30 de mayo, en la sede del IPIN (Instituto Para el Ideario Nacional) se exhibió el documental “Hambre de soja”, que plantea los graves problemas sociales, económicos y culturales que se generan –desde comienzos de la década del ´90- por la siembra directa de soja transgénica, que otorga mayor rentabilidad para los productores a costa de la desertificación del suelo, la contaminación, la desocupación, y una gran concentración de la riqueza nacional en manos de empresas extranjeras.
En una sala colmada de asistentes para ver el documental de Marcelo Viñas, estuvieron presentes durante la proyección y el posterior debate: la Diputada de la Nación Dra. Nora César (FpV – Buenos Aires); el Concejal Carlos Melzi (FpV – La Plata); las concejales Valeria Iglesias y Olga Casado (FpV – General Villegas) –quienes viajaron especialmente a la ciudad de La Plata para participar de este encuentro-; la Directora Provincial de Educación Superior y Capacitación Educativa, Lic. Verónica Piovani; el Decano de la Facultad de Periodismo y Comunicación Social de la UNLP, Lic. Alejandro Verano; el Coordinador del IPIN, Dr. Sergio Aliandri; la dirigente de la Agrupación Peronismo Platense, Ana María Herrán (esposa del Secretario de Coordinación del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación Carlos Castagneto); los Agentes de Modernización del Gobierno de la provincia de Buenos Aires, Lic. Natalia De Sio y Lic. Federico Del Giorgio Solfa; y la Madre de Plaza de Mayo Nora Centeno, entre otros.
Durante el debate se destacó la tarea realizada por el ex Presidente Néstor Kirchner para contrarrestar los graves perjuicios del monopolio sojero, como así también la serie de medidas instrumentadas en tal sentido por la actual Presidenta de la Nación, Dra. Cristina Fernández de Kirchner.
El modelo rural de los ´90 ha producido una gran concentración de riqueza para pocos, mientras se materializaba una “fábrica de pobres”, desperdigando recursos naturales sin resguardo ni recuperación, con un fuerte impacto ambiental, social, laboral, nutricional, inmobiliario, económico y financiero, en desmedro de otros cultivos y de la actividad ganadera. Además, se estima que si no se adoptan las políticas adecuadas, en 15 ó 20 años, los suelos –en grandes extensiones de la Argentina- serán infértiles para todo tipo de cultivos.
Todos los asistentes coincidieron en la necesidad de difundir este documental, tanto en colegios como en diversas instituciones, para que el conocimiento más profundo de esta compleja problemática pueda ayudar a esclarecer los verdaderos intereses que se esconden detrás del reclamo de los dirigentes rurales
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