Las iniciativas fueron explicitadas por el Director General de Cultura y Educación, Mario Oporto, ante diputados y senadores durante el informe anual sobre educación en la Legislatura provincial. De la presentación participó el gobernador Daniel Scioli, en un hecho desusado en la Provincia, que fue resaltado por Oporto como “una muestra de la importancia que el Gobernador otorga a este tema”.
Durante su discurso, Oporto pidió a los legisladores que acompañen al Ejecutivo con la sanción de algunas leyes clave. Entre ellas, mencionó una nueva norma para regular la educación privada, que apuntará a dos objetivos: “tender a una supervisión pedagógica única” entre esos establecimientos y los de gestión privada y “discutir” el espinoso tema de los subsidios que reciben los colegios privados, la mayoría de los cuales pertenecen a la Iglesia Católica.
El titular de Educación también aseguró que se propone avanzar en una “modernización integral” del Estatuto Docentes, pero “no para cercenar derechos de los trabajadores ni acotar sus posibilidades de licencia”, sino para adaptarlo a los tiempos que corren.
Oporto también se propone avanzar sobre la organización de los consejos escolares, para hacerlos “más eficientes y transparentes”. Dijo que esos organismos gozan de mayor autonomía pero deben tener “mayor profesionalismo”.
En una detalla descripción del funcionamiento y los principales desafíos del sistema educativo provincial, Oporto planteó también la meta de incorporar al sistema, en los próximos cuatro años, la totalidad de los chicos de 3 años: para ellos hará falta construir unos mil jardines de infantes, con una inversión de entre 800 y mil millones de pesos.
Este año, dijo, se hará 120 y en 2009, 210, si llegan fondos extra de la Nación a través del plan “100 escuelas”.
Finalmente, el responsable del sistema educativo provincial dijo que el principal desafío en el nivel primario será superar los “altos” índices de repitencia y sobre edad, aumentando a la vez de 720 a 900 las horas de clases anuales y, en el secundario, la deserción escolar.
“Necesitamos una escuela que incluya y a la vez de calidad”, explicó el funcionario, para quien “una cosa sin la otra no funciona”
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