Un abogado y un santafesino dueño de una suerte de museo clandestino de piezas arqueológicas comercializadas de manera presuntamente ilegal fueron acusados por la policía de integrar una red dedicada al tráfico de ilegal de bienes culturales.
El Departamento Interpol de la Policía Federal informó que desbarató una banda internacional que comercializaba piezas arqueológicas y paleontológicas del siglo VII pertenecientes a la cultura moche, originaria de Perú.
La policía supo, en 2006, que se estaban vendiendo estas piezas a través de Internet y dio intervención al juzgado federal de Lomas de Zamora de Alberto Santamarina. Tras determinar que parte de los ofrecimientos provenían del sur del conurbano, los uniformados intervinieron teléfonos de los comerciantes y ubicaron el lugar.
Con una orden judicial, allanaron la casa de un abogado, en Temperley, y se incautaron de 12 piezas, cuyo valor en el mercado del arte oscila entre los 5000 y los 8000 dólares por unidad.
También allanaron una suerte de museo privado situado en la localidad de Villa Cañás, provincia de Santa Fe, en el que se incautaron 105 piezas y fósiles de un valor comercial millonario en la moneda estadounidense, según la fuente.
Las piezas, en su mayoría, eran estatuillas, vasijas, máscaras y hachas para sacrificios, y provenían de Perú. Llegaban hasta Santa Fe por tierra y de allí eran trasladadas a Temperley, desde donde se las comercializaba a países de Europa y a Estados Unidos vía Internet o sino directamente a turistas de visita en la Argentina.
El valor de venta de cada pieza histórica estaba consignado en una lista de precios encontrada en el museo de Villa Cañás. Allí se encontraron 70 fósiles de distinto tipo, tamaño y antigüedad y 35 objetos arqueológicos, entre ellos, hachas de la cultura moche utilizadas para sacrificios y vasijas antropo- mórficas.
Tanto el abogado como el propietario del museo santafesino han sido citados a prestar declaración indagatoria en el juzgado federal N° 2 de Lomas de Zamora como imputados por tráfico y venta ilegal de patrimonio arqueológico y paleontológico. La ley 25.743 castiga con multas y penas que van desde los dos meses hasta los dos años de prisión al que «transportare, almacenare, comprare, vendiere, indus- trializare o de cualquier modo pusiere en el comercio piezas, productos o subproductos provenientes de yacimientos arqueológicos y paleontológicos nacionales e internacionales».
Villa Cañas
Los efectivos policiales allanaron una suerte de “museo” privado que no tenía habilitación y funcionaba en la casa de Alejandro Wigrebe, en la localidad de Villa Cañás, en la provincia de Santa Fe, donde se incautaron 105 piezas y fósiles de un valor comercial millonario en moneda estadounidense.
En la ex casa del cambista del Ferrocarril, donde funciona el Museo de Ciencias Naturales, la Policía Federal realizó un allanamiento y secuestró restos fósiles.
Los uniformados, portando un exhorto del Juzgado Federal de Lomas de Zamora y con una orden de allanamiento del Juzgado Federal de Rosario, se presentaron en la Comisaría 6ª de Villa Cañás, donde se entrevistaron con su titular En el procedimiento secuestraron “restos fósiles que no estaban correctamente registrados de acuerdo a la ley vigente”.
Aclaró que “si los responsables del museo presentan documentación que acredite la procedencia de los mismos les serán restituidas”.
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