El complejo incluye un hotel tres estrellas superior con 40 habitaciones y una sala de convenciones con capacidad para albergar a 500 personas.
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El proyecto incluye rescatar el valor patrimonial de edificaciones de la zona y al mismo tiempo una renovada oferta de servicios vinculados con el turismo, el esparcimiento y el relax recuperando así el esplendor que tuvieron en otras épocas las ciudades de Melincué y Firmat, unidas por un corredor de unos 25 kilómetros. Los empresarios indican que las propiedades de la zona se elevaron. Un ejemplo es que en Carreras una población que se encuentra a 13 kilómetros las casas aumentaron de valor y así en toda la zona.
Además de la iniciativa netamente privada, la propuesta también está respaldada por los integrantes del Ente Turístico —un organismo ad hoc conformado por el sector público y privado— que recientemente presentaron un proyecto para construir un tren a vapor para unir Firmat y Melincué y que desemboque en el hotel casino que se está construyendo en la zona, y que contará con un centro de convenciones para 500 personas.
Rubén Lang, titular del hotel Posta de Juárez, está a la cabeza del proyecto y señaló que sólo la puesta en marcha de la locomotora demandará un 1,5 millón de pesos.
Más allá de esta propuesta puntual, los capitales que están llegando a la zona lo hacen para consolidar el polo turístico en el sur santafesino. La intención es ofrecer a los visitantes opciones de turismo rural o de estancias, aunque a un precio más accesible que las ubicadas en la provincia de Buenos Aires con paquetes que incluyen, entre otras cosas, cabalgatas y safaris fotográficos.
Pero al mismo tiempo, también se está trabajando en la puesta a punto de los servicios básicos para el turismo como la gastronomía o el alojamiento. Así, entre las ideas en danza se encuentran la de remozar las estaciones de trenes y refaccionar los viejos almacenes de pueblo para transformarlos en restaurantes, aunque conservando, y preservando los detalles que los vuelven únicos.
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