Un cronista de Colón Doce fue recibido por Carlos Enrique Rocca en su casa de barrio Rivadavia. “Lo primero que te digo es que yo soy cartonero y no ciruja, además no tengo cocina a leña como pusiste en la nota, sino un calentador y no voy a Basural Municipal, el que va a veces es mi hijo”. Argumentó Rocca.
En la mesa se sentó en la cabecera y recordaba con exactitud fechas y sucesos de aquellos años de plomo. “En San Nicolás era chofer y lo único que hacía era ir a buscar comida y pizza, yo no se nada y jámaz participe de un operativo de secuestro”. El cronista le contesta que “en la causa judicial el fiscal Murray lo acusa del secuestro de Lanzilloto, sus hijos y elapoderamiento de la casa donde vivia.
Además le aclaramos que los vecinos de la vivienda en cuestión dicen que usted vivió en la casa del matrimonio Lanzilotto-Santillan”. El acusado se muestra tranquilo, y pide que lo que dice al periodista se anote y aclara que no se vaya a gravar sus palabras ni a fotografiar su persona.
En un primer momento nos manifiesta: “ A mi la casa me la entregó Bossie”. Sin embargo pasan varios minutos y cuando volvemos a insistir con el tema de la vivienda, Rocca señala: “la casa me lo entregó la policía en custodia y yo viví cuatro años en ella. Esa casa estuvo tres meses desabitada luego del secuestro”.
Y acota “yo vivía en una pensión que se llamaba Sarmiento en Pergamino y como debía un mes y medio de alquiler y me iban a desalojar en 24 horas, entonces hable con un jefe en San Nicolás, para ver si conocía alguna piecita para poder ir. Entonces el me dijo que en Pergamino había una casa y que me la podían dar. Colón Doce le preguntó el nombre de ese oficial, a lo que señaló: “no te lo puedo decir, mi abogada lo sabe” Sin embargo más delante de la conversación el cartonero da un nombre de un suboficial de apellido Ríos.
El cartonero en presencia de su mujer y sus hijos mayores nos dice “cuando ocurrió lo del secuestro de la mujer y sus hijos, yo estaba cumpliendo funciones como chofer en el Comando de Patrullas de San Nicolás, a 75 kilómetros de Pergamino, yo no tuve nada que ver con lo que me acusa Murray”.
Colón Doce le dice que en la causa judicial una mujer lo acusa y Rocca contesta: “no tengo conocimiento de esa mujer ni de quien se trata” agrega “ yo no estuve en el secuestro de la Lanzilloto, ni en el traslado de sus hijos, a mi la policía me dio la casa en custodia, nunca estuve en un operativo y no se nada de esas cosas”.
Colón Doce lindica que existe una versión que se fue de la policía por la muerte de una persona en un tiroteo en San Nicolás, a lo que el cartonero responde: “mentira, son todas mentiras, yo me fui por un problema particular”. Sobre si conocía al desaparecido, Carlos Santillan, expresó “yo al único Santillan que conozco es al padre del desaparecido que cuando yo vivía en esa casa de calle Rivadavia, unas vez vino a visitar a su hijo, pero estuvo cinco minutos y se fue”. La causa judicial
El juez Federal, Carlos Villafuerte Russo hoy viernes decidiría la situación procesal del cartonero Rocca en la causa por el secuestro de María Cristina Lanzilloto, sus hijos y el apoderamiento de la vivienda.
El jueves el fiscal Juan Murray, requirió la excarcelación del cartonero Carlos Enrique Rocca, quedando el colonense imputado en la grave causa judicial. El viernes el juez federal, Carlos Villafuerte Russo firmó el dictamen excarcelando a Rocca
La Policía Federal cumplió la orden del magistrado y el cartonero quedó en libertad, regresando a nuestra ciudad. Una fuente judicial explicó a Colón Doce que el cartonero acusado quedó libre debido a que no reunía peligrosidad procesal
Se trata de un delito de lesa humanidad por lo cual no prescribe. El imputado carga sobre sus espaldas estar acusado de haber estado presente en el secuestro de María Cristina Lanzilotto, sus hijos Jorge Francisco de un año y María Lucila de dos años de edad y el apoderamiento de la casa que habitaba en Rivadavia 954 de Pergamino.
En la causa también están imputados gozando de libertad, el coronel, Manuel Saint Aman, responsable del Area 132, subzona 13 (pertenecía Pergamino y Colón entre otras ciudades) y el mayor Antonio Federico Bossie que tenía el cargo de Jefe Operacional.
Una fuente reservada indicó a este semanario que el magistrado Carlos Villafuerte Russo, firmaría en el día de hoy la resolución sobre la situación procesal de Rocca.
Según se supo, existiría un testimonio de la ex mujer (primera nupcias) que sería muy puntual sobre el apoderamiento de la vivienda de calle Rivadavia en Pergamino y que pertenecía al matrimonio Santillan- Lanzilotto. El secuestro de Maria Cristina Lanzilotto y de sus dos hijos, en la jornada del 17 de noviembre de 1976. Por otro lado, en el expediente también existen el testimonio de personas que habitaban la cuadra donde tenía residencia el matrimonio desaparecido y que dan cuenta de la posibilidad cierta de apropiación de la vivienda por parte de Rocca.
El cartonero Carlos Enrique Rocca, pidió la baja de la Policía Bonaerense en 1978, desconociéndose los motivos que llevaron al acto administrativo.
En la causa judicial, existe un informe ambiental pedido por su abogada defensora Dra. Gambacorta. El escrito fue llevado adelante por la Secretaría de Acción Social de la Municipalidad de Colón a través de las visita- doras sociales. En el mismo constaría la situación familiar de Rocca, donde vive, bajo que características, como se gana la vida y que en el presente estaría asentado en nuestra ciudad.
Se supo además que Rocca en sus conversaciones con los miem bros del poder judicial (se habría negado a declarar) se expresó correctamente, coordinando espacio y tiempo y usando un léxico claro, aunque estaría “endurecido por la pobreza”.
El padre de Roca ya fallecido era una persona de clase media que tenía un comercio y que vivía en nuestra ciudad, el cartonero habría cursado sus estudios primarios en Colón, y de joven ingresó a la policía bonaerense, donde se retiro en l978.
A mediados de la década de los ochenta regresó a Colón Actualmente tiene pareja, e hijos menores, y se domicilia en una casa entregada por planes sociales. Como se recordará, María Cristina Lanzilloto y sus dos hijos fueron secuestrados en Pergamino, mientras que Carlos Santillan fue raptado en San Nicolás. El cadáver de Lanzillo to fue encontrado en el Cementerio de Avellaneda, donde los militares enterraron a 336 cuerpos como NN.
El Equipo Argentino de Antropología logró descifrar su ADN y pudo identificarla. Su cuerpo fue devuelto a sus padres que residen en la Banda, provincia de Santiago del Estero. El cuerpo de Carlos Santillan nunca apareció. En tanto, que los dos hijos raptados, en noviembre de l976, fueron abandonados en cercanías del capilla Cristo Rey de Fishertón. Los encontró una mujer que los cuidó durante varios meses hasta que encontraron los abuelos. Hoy esa mujer es la madrina de los chicos que ya son mayores de edad
Habla la madre de Plaza de Mayo, Alba Lanzilotto
En el Nuevo Diario de Santiago del Estero Alba Lanzilloto, una de la máximas dirigente de las Abuelas de Plaza de Mayo informó: “Hace unos días fue detenido Carlos Roca, acusado de haber secuestrado a mi hermana María Cristina Lanzillotto, a su esposo Carlos Santillán y a sus hijos María Lucila y Jorge, quienes en 1976, vivían en la ciudad de Pergamino”. Alba Lanzillotto precisó: “De acuerdo con la información que manejo, la detención de Roca se produce a raíz de una denuncia efectuada ante la Justicia Federal por su ex esposa. A partir de allí, el juez Villafuerte Russo ordenó la inmediata detención del ex policía”. La dirigente de las Abuelas de Plaza de Mayo especificó: “La Justicia ya tenía antecedentes de este hombre y además este sujeto integraba una lista de gente que participó en los secuestros de otras personas en la época de la dictadura militar”. Cabe indicar que María Cristina Lanzillotto y Carlos Santillán eran militantes activos del Ejército Revolucionario del Pueblo. Lanzillotto manifestó que Carlos Rocca vivía en la más grande miseria, a tal punto que en los últimos años se convirtió en cartonero. “Este ex policía fue detenido en la localidad de Colón, que está ubicada cerca de la ciudad de Pergamino Por último, Alba Lanzillotto manifestó que “se continúa trabajando en la búsqueda del cuerpo de Carlos Santillán, pero hasta el momento no hemos tenido ninguna novedad”.
El otro caso pergaminense que se apropiaron de su casa
Se trata del nieto de Héctor Oesterheld, nieto del creador de El Etenernauta que intenta recuperar a su hermano o hermana, un año y medio menor que él, quien nació en cautiverio mientras su madre se encontraba secuestrada en un campo clandestino y fue apropiado por los grupos represivos. Fernando Oestherfield , se presentó en Juzgado FederalNº 1 de Tucumán, y acusó al ex jefe del Servicio de Inteligencia Confidencial (SIC) de la policía tucumana , Roberto Albornoz, alias el «Tuerto», de ser quien secuestró a su madre embarazada y a él, y luego usurpó la vivienda. El 26 de julio de 1976, el represor Albornoz secuestro al joven y su madre La mujer fue trasladada a Campo de Mayo, en Buenos Aires, donde dio a luz. Fernando, que tenía poco más de un año de edad en aquel momento, fue entregado por la policía a la Casa Cuna tucumana como NN, de donde fue rescatado luego de un mes por sus abuelos paternos, quienes lo llevaron a la ciudad de Pergamino, donde creció. El secuestro y desaparición de Diana Oesterheld fue denunciado por la Asamblea Permanente de Derechos Humanos y corresponde al legajo 3145 de la CONADEP, lo que implica que fue denunciado en 1984 y presentado en el juicio a la Junta de 1985. Su hijo declaró en el marco de una causa iniciada por la comisión de «Familiares de Desaparecidos» de Tucumán (expediente 1442).
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