El proceso duró cuatro años.
En el Consejo Escolar durante el periodo 2003 a 2007 se sucedieron una serie de enfren- tamientos que ahora comienzan a cerrar a través de los procesos administrativos y judiciales.
En el comienzo del año 2004, y cuando recién comenzaba a funcionar el Consejo Escolar con los consejeros asumidos el 1 de diciembre de 2003, los empleados Marcelo Aires y Nora Chevalley denunciaron en la justicia a la presidente Liliana Grosso por maltrato, discriminación, acoso e incumplimiento de los deberes de funcionario público. En aquel entonces se inicio una causa judicial y un expediente administrativo. Los meses transcurrieron y a fines del 2005 las denuncias fueron desestimadas por falta de mérito y archivados.
La sanción
El 23 de noviembre de 2005, el cuerpo de consejeras, por unanimidad, sanciona a la consejera, Lidia Balles con la “destitución” por conducta impropia de una funcionaria pública, ante empleados del Consejo Escolar. Las versiones indicaban que había habido gritos y maltratos.
La consejera Balles presenta un recurso de “no innovar” ante el Juzgado Contencioso Administrativo de San Nicolás de la Dra. Marisa Fulgheri y otorga la medida cautelar manteniendo a la destituida en el cargo, hasta que se dicte sentencia firme. La medida en lo contencioso le permitió mantener el cargo de consejera a Ballés.
La Provincia
El lunes 28 de mayo de 2007, la Directora General de Cultura y Educación, Adriana Puiggros firmó la Resolución Nº 1544 donde se confirma la destitución de Lilia Ballés como Consejera Escolar de Colón.
Se supo que el Consejo Escolar está a la espera de la decisión del Juez Intervi- niente para hacer efectiva la medida dispuesta en la Resolución 1544.
La denuncia
Por otro lado, la consejera, Lidia Ballés había denunciado a la presidenta Liliana Grosso por “Incumplimiento de deberes de funcionario público y falsificación de documentos”.
La acusaba de borrar y rehacer parte del acta donde fue destituida. En este sentido, y a través de una Célula Judicial de la Justicia de Pergamino, la consejera Grosso fue notificada de su sobresei- miento y en parte del fallo dice “ La enmienda o inserción en el acta Nº 937 (por lo que fue denunciada), reconocida por la propia imputada, no constituye una declaración falsa dolosamente introducida, ni se determino la falta de adecuación a la realidad de lo acontecido”.
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